Parece ser que el gobernador Alfredo Cornejo es aquélla persona que te «pincha» el chiste antes que termine, quién en una sala de cine grita fuerte el final de la pelicula… «el bueno muere! el bueno muere!», que te anticipa el final de la telenovela…
Y lo hizo una vez más! El pasado 21 de septiembre, el senador provincial del oficialismo, Diego Costarelli, presentó un proyecto de ley que tenía como objeto designar con el nombre de “Nicolino Felipe Locche” al flamante Estadio Olímpico Cubierto Provincial ubicado dentro de la Villa Deportiva Provincial en el Parque General San Martín, sin embargo luego de su propuesta, diversos sectores se acercaron al legislador para proponerle nuevas ideas para nombrar a este lugar que albergará a miles de deportistas de la provincia, el país y el mundo.
Daniel Galdeano, también se sumó a la iniciativa y en vez de realizar un proyecto de ley paralelo, con otro nombre y someterlo a votación en comisiones, decidieron con Costarelli trabajar en conjunto y que sea la gente quien elija el nombre del recinto deportivo cuyano.
La metodología por la cual se iba a elegir el nombre del Estadio Olímpico, era a través de una encuesta en las redes sociales (Twitter y Facebook), en la cuales los ciudadanos podían votar por cuatro opciones, a través de sus cuentas, desde cualquier lugar y en forma anónima. Nicolino Locche, Elsa Pennesi, Aconcagua Arena o Libertador San Martín, eran las opciones.
Una propuesta «piola y muy divertida» que proponía hacer un atractivo juego participativo entre los mendocinos. No obstante, siempre aparece un «aguafiestas» y en ese caso fue el gobernador Cornejo… en el misma Legislatura donde surgió la idea de la elección popular, por orden del primer mandatario provincial ingresó proyecto para nombrar directamente Aconcagua Arena» al estadio cubierto, lo cual, desafectó completamente la elección popular en las redes, que ya se había empezado a desarrollar.
Esta desprolijidad provocó un insólito debate entre oficialistas y la oposición en la Legislatura de más de una hora que trataremos de olvidar lo más rápido posible… todo esto dentro de un contexto socioeconómico que requiere «un poquito» mayor de atención.
La encuesta estuvo vigente hasta el jueves 25 de octubre a las 22 hs. y al finalizar el resultado fue supervisado por la escribana pública Andrea Morcos.
Con el resuelto del escrutinio de la encuesta, en la cual participaron miles de personas, se definió la elección del nombre del Estadio que eligieron los ciudadanos. Tal como había anticipado Cornejo «justamente» el nombre ganador fue «Aconcagua Arena» con 2121 votos. Si! ganó el gobernador… un «spoiler» sin remedio…
[ot-caption title=»» url=»http://www.biencuyano.com.ar/wp-content/uploads/2018/10/estadio6.jpg»]
¿Qué es un spoiler?
Como spoiler se denomina, en español, aquel texto que revela o adelanta información que se ignora sobre la trama de un programa de televisión, una película o un libro, arruinando el suspenso o la sorpresa final. La palabra, como tal, deriva del verbo to spoil, que en inglés significa ‘arruinar o destruir el valor o calidad de algo’.
De allí a la hora de introducirlos, se considere conveniente avisar antes a los lectores o interlocutores mediante la expresión “advertencia de spoiler” o, en inglés, spoiler alert, con lo cual se informa sobre la posibilidad de enterarse de eventos o giros de trama futuros que resten interés o suspenso al desarrollo de la historia que se está siguiendo.
Por otra parte, spoiler también puede referirse, en el ámbito de la aerodinámica, a un dispositivo giratorio empleado para reducir la fuerza de sustentación de un aeronave, que se encuentra ubicado en la parte posterior del ala del avión. A este dispositivo también se lo conoce con los nombres de deflector o disruptor.
Asimismo, en un automóvil, como spoiler o espóiler se designa a un tipo de alerón, ubicado en la parte posterior del auto, con la finalidad de otorgarle mayor estabilidad a altas velocidades, entre otras cosas.
En inglés, y en el ámbito de la política, spoiler puede referirse a aquel candidato que, a pesar de que carece de posibilidades de ganar, puede funcionar para obstaculizar o impedir la victoria de otro candidato.