La mezquindad del cornejismo hizo que Luis Petri fuera el máximo representante radical en la Vendimia de Luján ¿Y la grandeza política del diálogo?

Actualidad Mendoza

Tanto el gobernador Rodolfo Suarez como su jefe Alfredo Cornejo boquean mediáticamente que «son un gobierno de diálogo», no obstante, del dicho al hecho la realidad es muy distinta. Ningún funcionario ni dirigente político del cornejismo estuvo presente en el acto vendimial de uno de los principales departamentos de la provincia, Luján de Cuyo, gestionado desde lo político por el frente Cambia Mendoza.

Salvo la ministra de Turismo provincial, Nora Vicario, del sector político de Ulpiano Suarez, que presenció la gran fiesta en la Tierra del Malbec, el cornejismo mandó una señal de mezquindad política, soberbia y capricho, con sus notorias ausencias, que no suman para proyectar una Mendoza de apertura y dialoguista a fin de dar un salto de calidad en la gestión, con un mejor futuro para todos los mendocinos con diferentes visiones e ideas.

Lo obtuso no suma. Por eso el dirigente radical y precandidato a gobernador de Mendoza, Luis Petri, rompió el molde y estuvo presente en la fiesta organizada por sus socio político de Cambia Mendoza. Estuvo disfrutando del espectáculo acompañado por su pareja, la reconocida periodista Cristina Perez.

«Estamos en un mismo espacio republicano, con los mismos valores y luchamos todos por lo mejor para la provincia de Mendoza. Esto hace a la calidad institucional y democrática de Mendoza. Que personas que hoy compiten puedan estar juntas sin ponerse coloradas», aseveró Petri a la periodista Andrea Ginestar en medio de las tensiones en aumento entre De Marchi y el cornejismo.

«Tenemos un desafío en Mendoza: cambiar la vida de la gente y para eso tenemos que sumar esfuerzos aún en las diferencias», subrayó el precandidato a gobernador que está decidido a ir a las PASO a competir contra todos los aspirantes que se presenten.

«La competencia y el debate de ideas van a mejorar las posibilidades de que Mendoza se transforme. Y por eso vine a Luján como he ido a otras vendimias», explicó a MDZ y descartó ser compañero de fórmula de De Marchi.

«Siempre he dicho que quiero competir. No quiero ser vice, quiero ser gobernador de Mendoza. Ese es mi objetivo, porque Mendoza tiene un potencial enorme pero tiene que resolver muchos de los problemas estructurales que hace muchísimo tiene postergados», manifestó. 

En ese sentido sostuvo que hay que preguntarles a otros referentes y candidatos por qué no asistieron a Luján. «La pregunta es por qué no vienen. La vendimia es un es un momento mágico para Mendoza porque nos da esperanza de que el próximo año puede ser mejor. Es una puerta al mundo», concluyó el precandidato provincial, Luis Petri.