La bella reina de 20 años, estudiante de psicología, que representó a la ciudad de Maipú, Victoria Colovatti, fue elegida Reina Nacional de la Vendimia, con 50 votos, en una edición 81 de la gran fiesta mendocina que contó con la presencia de más de 15 mil espectadores. Victoria coincidió con el gusto del público según las encuestas iniciales que organizaron varios medios locales, lo cual sin dudas, tiene su merecido premio.
Como virreina, con 39 votos, quedó Romina Pettaro, representante San Carlos, de 19 años y estudiante de Comercio Internacional y Administración de Empresas.
«¡Buenas noches Mendoza! No se imaginan la alegría enorme que me causa haber sido elegida por todos ustedes. Haber sido elegida para representar el trabajo de todos los trabajadores de la tierra. No quiero dejar de mencionar a los artistas, que a pesar de las adversidades han protagonizado una fiesta hermosa», expresó la bella soberana maipucina.
«El año pasado estuve aquí como espectadora y hoy recibo la corona: es algo que me llena de emoción», aseguró la joven.
«Justo en el día de mi cumpleaños, estoy cumpliendo un sueño increíble. Gracias a mi familia y a mis amigos, que han sido el pilar que me ha acompañado en todo momento. Este sueño era mío y de todo un pueblo, mi querido Maipú. ¡Esto es para todos ustedes!», cerró Victoria con la voz quebrada.
Una fiesta que se realizó un día más tarde de lo programado, debido a un grave accidente con la infraestructura del teatro griego durante los ensayos previos. La caída de la grúa y la explosión en la caja eléctrica, generaron un estado de improvisación ante el electo de actores y técnicos que en un momento peligraba la realización de la misma. El espectáculo que se ofreció este domingo denominado «Con el vino en la piel», que fue trasmitido por la TV Pública para todo el país, fue modificado y remendado, ya que se suspendieron algunos números que generaban cierto peligro, tal es el caso del show basado en el teatro aéreo, con proezas de actores voladores, que se vio obligado a suspender por no ofrecer garantías. No hubo fuegos artificiales y el guión terminó siendo muy aburrido, en donde lo único rescatable fue el majestuoso escenario.
Por primera vez en la historia de la fiesta de la Vendima, en la edición 81 “Con el Vino en la Piel” el publico asistente eligió a la reina y vireina. La metodología fue la siguiente: cada sector tenía un porcentaje de votantes según la capacidad y, por bolillero, frente a escribano público, se asignó a cada zona un número que deberá coincidir con con el último del DNI de la persona que emita su voto.
Así es como en el Sector Malbec votaron 70 personas cuyos DNI finalizaban con 9; mientras que el Sector Tempranillo sufragaron 80 personas con el número 3. Cabernet Sauvignon votaron 25 personas cuyo documento terminaban con el número 1 y Bonarda fueron 60 con el número 5; Chardonnay 40 cuyos DNI finalizaron en 4 y por último el Torrontes, votaron 25 personas con el número 7.
Pero la votación no estuvo bien organizada, lo que provocó que algunos aprovecharan para hacer lobby o adelantarse en las extensas filas y esto caldeó los ánimos. También hubo empujones y en algunos casos, amenazas, colados, lo que generó un estado de situación lamentable antes de comenzar el show. El voto fue «casi cantado» y también podía verse a través de la urna de acrílico a quién votaba cada uno.
También la conducción del evento dejó mucho que desear y pareció muy desprolijo. La presentación de las reinas departamentales no era bien coordinada con la proyección de las imagenes y quedó en algunos casos muy superpuestas entre una y otra. También marcó la diferencia la presentación de la reina departamental de Maipú (que fue finalmente la ganadora) con el resto, lo cual ya marcaba desde el comienzo del espectaculo el resultado final.
Muchas cosas para analizar y corregir, en una edición que solo pone contento al querido pueblo de Maipú.