Ante la incertidumbre y la pérdida de liderazgo del presidente de la UCR Nacional, cruje el radicalismo y parte se escapa de la debacle final

Actualidad Mendoza

El centenario partido está en un momento de total desconcierto. La tropa radical está dispersa y sin un serio líder que conduzca los ideales que alguna vez levantaron Raúl Alfonsín, Arturo Illia, Leandro Alem, Hipólito Yrigoyen o Ricardo Balbín.

Su presidente partidario a nivel nacional, el mendocino Alfredo Cornejo, está escondido debajo de la alfombra y sin rumbo, ya no participa de la mesa chica de Casa Rosada, no contribuye para solucionar la actual crisis política que padece Cambiemos, no participa en los reclamos de las provincias… realmente no sabe si es oficialista u opositor, si está feliz con las medidas económicas adoptadas por el gobierno nacional o está en disconformidad. Para decirlo en criollo: «Hoy Cornejo no pincha ni corta».

Es posible que los próximos días, tras su regreso de las bellas playas de Costa Rica, el bronceado Cornejo chille un poco para los medios locales «amigos» aplaudidores y desprestigie con «chicanas» al rival… pero de propuestas para paliar la profunda crisis social y económica que padece hoy su provincia de Mendoza, poco y nada. Para decir otra frase popular «Perro que ladra no muerde».

Muchos radicales lo conocen muy bien a Alfredito y su forma verticalista de conducir el partido, sin consensos y «solo a mi modo». Por eso, desde Mendoza muchos se empezaron a fugarse de su conducción. En la interna, Omar De Marchi recibió a muchos de ellos, heridos, que no estaban de acuerdo en la forma autoritaria de elegir nombres para las candidaturas.

La convención radical dejó al desnudo el desconcierto del presidente de la UCR Nacional, dejando muchas dudas si lo mejor era romper con la política neoliberal de Macri y jugársela de pie con sus propias convicciones e ideales partidarios o seguir acompañando el proyecto de derecha de «Cambiemos» hasta el final.

Con Cornejo no fue ni una ni otra: No rompió y no acompaña en este dramático (posible) final. No ayuda, ni acerca propuestas concretas para la «levantada» iniciada desde este #24A. Ni fu, ni fa… y los radicales lo saben… lo sabe Freddy, lo sabe Ricardito… lo saben muchos…

Cornejo también lo sabe. Por eso en las PASO en su territorio no existió ningún afiche pegado con la imagen de Mauricio Macri en ninguna calle de Mendoza… el radical sabía que el porteño le «piantaba votos» para su quinta y por eso lo «desconoció» en estos últimos tiempos electorales.

¿El regreso del cornejismo K?

Ayer en Mendoza hubo un hecho trascendental. El radicalismo, tal como hicieron Cornejo y Cobos en tiempos de Néstor Kirchner, volvieron a retomar el camino «Nacional y Popular».

En un encuentro en San Martín se reunieron cerca de 300 personas para brindar su apoyo explícito a la fórmula Fernández Sagasti-Tanús y Fernández-Fernández a nivel nacional.

Fue el lanzamiento formal de la «Línea Alfonsinista» en la provincia de Mendoza y estuvieron, además del intendente de San Martín, Jorge Omar Giménez, Armando Pérez, La Paz,  Débora Quiroga, Santa Rosa, Alexander Masa, Rivadavia, Pablo Guzmán Junín, Omar Abdo, San Martín, Pablo Guiñazu y Joel Delgado,  Maipú.

Anabel Fernández Sagasti anunció «Voy a hacer un gobierno de inclusión para cerrar la grieta. Mi equipo de trabajo estará compuesto de hombres, mujeres, jóvenes, mayores, que estén bien preparados. Vengan de donde vengan y de cualquier ideología política. Sean independientes, peronistas o radicales. Mi única condición es que pongan los intereses de Mendoza por encima de sus intereses personales y políticos. Vamos a trabajar juntos por el bien de todos los mendocinos y las mendocinas».

Una de las figuras presentes en este encuentro fue la pionera del «portazo» al cornejismo, la referente radical de Santa Rosa, Débora Quiroga, que señaló «hace mucho no nos une nada con Norma Trigo pero lo que nos reúne hoy es el sentido común porque sabemos que la gente no la está pasando bien. Estamos tratando de entender el mensaje de la gente y hacer algo para que esto cambie.»

Por su parte, otro radical Omar Abdo, que hoy acompaña a Jorge Giménez en San Martín, del Movimiento Alfonsinista, destacó «Hemos dicho siempre que nos corremos del radicalismo para poder ser radicales. Para sostener las viejas banderas de Yrigoyen, Alem y el pensamiento de Alfonsín que dijo que nuestro límite era la derecha y la derecha es Macri. No se puede acompañar un proyecto que generó tanta hambre, desazón y desesperación en la comunidad»

En la misma sintonía, Armando Pérez afirmó «Estamos avergonzados de lo que está pasando. No comprendemos la situación porque queremos seguir estando del lado de la gente y la gente con este modelo la está pasando muy mal. En La Paz me da vergüenza decir que hay un gobierno que lleva a ganar a un municipal un indigente».

Los radicales presentes expresaron que el partido nunca se alió a los sectores antipopulares de la Argentina y América Latina, por ese motivo deciden apoyar al Frente de Todos.

Dos exconcejales radicales de Maipú también saltaron de vereda y ahora apoyan al candidato del peronismo. Joel Delgado y Pablo Guiñazú son dirigentes que trabajaban en el sector de Sergio Dragoni (que en las PASO fue con Omar De Marchi y perdió frente a Néstor Majul). 

El pase se concretó el domingo pasado pero se venía elaborando desde que Matías Stevanto asumió el año pasado como jefe de gabinete. El candidato a intendente buscó desde el primer momento diferenciarse de Alejandro Bermejo potenciando los lazos con todos los partidos y ya en sus primeras actividades se veían concejales de la oposición. 

En lo que va de la campaña ya se sumaron al Frente Elegí de Maipú los dirigentes radicales Walter Gallardo, Daniel Pereira, Noelia Sguasini, Jhonatan Díaz, Tamara López, Fernando Mora. 

La línea alfonsinista

Este sector radical declara reconocer la lucha por la dignidad del pueblo y destacan la esperanza que genera la fórmula compuesta en la Nación por el doctor, Alberto Fernández y la doctora, Cristina Fernández y en la provincia de Mendoza por la doctora, Anabel Fernández Sagasti y Jorge Tanús. 

Al respecto, expresaron mediante un comunicado su postura frente a la realidad social mendocina y nacional. Muy lejos de Alfredo Cornejo y Rody Suárez…

EL ALFONSINISMO EN MENDOZA

El tiempo transcurrido en estos años del gobierno de Cambiemos y cambia Mendoza representan para nutridos sectores de la U.C.R. y la comunidad una instancia de opresión y desilusión irreversible.

Es sabido que ningún partido resistió tantas vicisitudes políticas como el radicalismo en sus más de 120 años de vida, pero “NUNCA” este centenario partido se debería haber aliado a los sectores antipopulares de la Argentina y América latina.

Hoy lo vemos con el mayor sentido común que podría existir, además de nuestras distancias ideológicas con la actual gestión nacional, nos separan de este gobierno la concepción de lo que, para nosotros, como radicales, no está bien. Está muy mal que la clase media se desvanezca, que los pobres se multipliquen y que  el gobierno mire para otro lado, con un estado que parece justificar todo en la famosa herencia que supuestamente le dejaron. Un radical jamás miraría para otro lado mientras millones de ciudadanos la pasan mal.

Quienes dentro de nuestro partido han estimulado el «antiperonismo», fomentando la garantía de los sectores del privilegio a no permitir la unidad del campo popular, han desoído los mensajes superadores del doctor Ricardo Balbín y del General Juan Domingo Perón en la década del 70, como así también las actitudes del doctor Ricardo Raúl Alfonsín y del ex ministro Antonio Cafiero, a fines del año 1980.

Los documentos señeros como la contradicción fundamental, han desoído el legado sobre la búsqueda de un tercer movimiento histórico. No han entendido que la salida es con todos los ciudadanos comprometidos con el bien común.

Y tal como lo expresara Raúl Alfonsín: «Caminaremos juntos por la ancha avenida del campo popular, todos, con nuestras banderas partidarias pero un poco más bajas para que flamee la celeste y blanca más alto, marcando el rumbo».

Como mendocinos, no olvidamos tampoco el pensamiento del primer gobernador del retorno a la democracia, quien dejara el legado de la paz y de la calidad institucional, Don Santiago Felipe Llaver, quién expresara: «Si el radicalismo debe elegir un aliado político, únicamente lo puede hacer con el peronismo, jamás con los conservadores». Eso es lo que nosotros, como verdaderos radicales, sentimos también.

En la actualidad, los alfonsinistas reconocemos la lucha por la dignidad del pueblo y destacamos la esperanza que genera la fórmula integrada por el doctor, Alberto Fernández y la doctora, Cristina Fernández a nivel nacional y en nuestra provincia de Mendoza por la doctora, Anabel Fernández Sagasti y Jorge Tanus.

Formamos parte de este frente con autonomía, criterio, y autocrítica de las acciones políticas a futuro. Dejamos en segundo plano los destinos partidarios, para dar inicio al verdadero radicalismo.

Somos respetuosos de la voluntad popular, protagonista del destino de la patria. Somos el preámbulo que citaba Raúl Alfonsín en cada acto. Somos el alfonsinismo en Mendoza al servicio del pueblo.