Lejos de la calma, se avivan las llamas en la interna entre el radicalismo y Elisa Carrió. Al «palito» que la diputada le dedicó en Twitter a la cúpula del partido, mientras cenaban en Olivos con el presidente Mauricio Macri, una aliada de la chaqueña aumentó la tensión con el espacio aliado del Gobierno.
«Alfredo Cornejo no tiene historia en el radicalismo, entiendo que no pueda llegar a comprender el chiste de Lilita», dijo Mariana Zuvic en el programa de Alfredo Leuco en TN, en una chicana al presidente de la UCR, sobre el «chiste» que hizo Carrió al afirmar que «los maneja desde afuera».
La referente de la Coalición Cívica en Santa Cruz y estrecha colaboradora de Carrió dijo que su jefa política «hizo un chiste» y que se trata de una «radical de paladar negro, con corazón radical».
Además consideró como «desmedida y sobreactuada» la respuesta de la UCR, que exigió que la chaqueña «respete a los socios de la coalición de Gobierno que ella pretende destruir». «No entiendo a qué responde, pero no tenemos preocupación», dijo la diputada de Cambiemos en el Parlasur.
Mientras la cúpula del partido radical cenaba con Macri en Olivos, para tratar de bajar la tensión, la diputada tuiteó una foto suya en un restaurant con el mensaje «qué chistoso este bife de chorizo», con menciones al jefe de Gabinete, Marcos Peña y al titular del interbloque de Cambiemos de la Cámara baja Mario Negri.
Del encuentro participaron también el gobernador de Corrientes Gustavo Valdés, el de Jujuy Gerardo Morales, el senador Ángel Rozas y Ernesto Sanz, además del ministro del Interior Rogelio Frigerio, y el de Hacienda Nicolás Dujovne.
Carrió además publicó una imagen mientras da una propina de $ 100 para «reivindicarse de la propina de La Plata», después de que un mozo la criticara por haberle dejado solo $ 5. Así hizo referencia a la polémica que generó cuando recomendó a la clase media dar «propina» como un método para paliar la baja en la actividad económica.
El «mimo» a los radicales
El presidente Mauricio Macri recibió anoche a los gobernadores radicales Alfredo Cornejo (Mendoza), Gerardo Morales (Jujuy) y Gustavo Valdés (Corrientes) para evaluar cómo negociar con el peronismo la aprobación del Presupuesto 2019 y para reforzar la unidad de Cambiemos tras el vendaval que desató Elisa Carrió.
Según supo, la cúpula del radicalismo comenzó a elaborar una hoja de ruta para facilitar las conversaciones con los representantes del denominado PJ dialoguista.
El plan que le propusieron a Macri contempla tanto las variables económicas como las políticas, para evitar que esa extensa puja debilite a la alianza oficialista puertas adentro.
Para pulir algunos detalles de la propuesta, los tres mandatarios provinciales se reunieron en un hotel del centro porteño con otros representantes del radicalismo, entre los que figuraban el vicegobernador bonaerense, Daniel Salvador, y el titular del interbloque de Cambiemos en Diputados, Mario Negri, entre otros.
“Se analizó la agenda económica y cómo acompañará Cambiemos, unido hacia adentro, todo este proceso de discusión con el PJ dialoguista, que va a ser difícil y largo”, revelaron allegados al encuentro.
Más tarde, Cornejo, Morales, Valdés y Negri continuaron con las deliberaciones en la Casa Rosada, donde fueron recibidos por el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. Y los detalles del plan de la UCR finalmente llegaron a los oídos de Macri entrada la noche, cuando los mandatarios provinciales concurrieron a cenar a la Quinta de Olivos.
El gobierno de Cambiemos destinó todo su accionar político a lograr la aprobación del Presupuesto del año próximo, con el complejo esquema que demanda la carrera por reducir el déficit fiscal.
La necesidad de la Casa Rosada representa una oportunidad para los gobernadores, principalmente los opositores.
Al respecto, Peña admitió que entre los mandatarios provinciales no existen posturas unificadas. Pero sí aseguró que “la mayoría coincidió en ser respetuosos de la meta del 1,3 de déficit fiscal” que se acordó con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para este año.
El jefe de ministros también estableció la posición de la Nación para escuchar los pedidos de los gobernadores: “Este gobierno es el que más plata les ha devuelto a las provincias”.
La cumbre de Macri con Cornejo, Morales y Valdés se coordinó en los últimos días de junio, apenas después del encuentro que referentes del Gobierno nacional mantuvieron con los dirigentes del peronismo dialoguista: el gobernador cordobés, Juan Schiaretti; el gobernador salteño, Juan Manuel Urtubey; el jefe del bloque Justicialista en el Senado, Miguel Pichetto, y el líder del Frente Renovador, Sergio Massa.
Aquel cónclave reavivó el malestar de los radicales, que reclaman mayor participación en las negociaciones que lleva adelante la Casa Rosada.
Durante la cena en la Quinta de Olivos, seguramente se colaron las diferencias internas que expuso Carrió con sus críticas a la UCR y a Cornejo, el presidente del Comité Nacional del partido.
Los radicales elevaron su pedido a la Casa Rosada para que sosieguen a la líder de la Coalición Cívica (CC). Y por la situación, incluso Macri se vio obligado a ratificar la “fortaleza” de Cambiemos ante sus ministros en la reunión de gabinete que encabezó ayer.
Palabras más, palabras menos, Peña reprodujo la conversación que el Presidente mantuvo con su equipo y, sin mencionarla, trató de calmar a Carrió: “Tenemos que ser muy respetuosos del otro. Hay que tener cuidado de no herir susceptibilidades o de decir cosas que, por más que sean chistes, puedan llegar a herir susceptibilidades”.
El jefe de Gabinete recordó que Cambiemos “existe hace tan sólo tres años y que se sustenta a partir de la diversidad de orígenes, de tres fuerzas políticas que han convergido por decisión de los argentinos y de sus líderes para ofrecer una alternativa republicana, institucionalista, de desarrollo para nuestro país”.
“En ese contexto, es natural, como puede ocurrir en cualquier familia o en cualquier grupo humano, que pueda haber diferencias”, amplió el funcionario nacional.
Entre los socios radicales de la alianza Cambiemos hay molestias por algunas actitudes de la mesa chica macrista, que negocia directamente con algunos peronistas sin consultarlos.
El planteo de los integrantes del centenario partido no es nuevo, pero desde que el mendocino Alfredo Cornejo tomó las riendas de la UCR, se intensificaron.
En las conversaciones que se realizaron en distintos ámbitos, ayer hubo un compromiso de fortalecer el espacio.
En el radicalismo tomaron como un gesto de distensión la invitación que les hizo el presidente Mauricio Macri de recibirlos en la Quinta de Olivos, anoche, para cenar.