“He trabajado para que en este país, los hombres encuentren a las mujeres en todas partes, y no solo donde ellos vayan a buscarlas”.
Clara Campoamor
Una mujer es todas las mujeres y todas las mujeres pueden ser una y este 8M me toco cubrir el desayuno Coviar en Mendoza dentro de las actividades de la fiesta de la Vendimia, el evento es considerado importante dentro de lo político ya que asisten personalidades nacionales, provinciales y municipales de dicho mundillo.
Si bien este año la mega estrella iba a ser el gobierno y un blanqueo oficial de las relaciones con la Nación en materia de unidad política partidaria… lamentablemente los mandamás faltaron a la cita y la noticia o el botón que al apretarse que maneja la centralidad de la noticia, no pudo ser apretado por el oficialismo local. Desilusión, el discurso leído por AC era para eso y la pólvora se mojó.
No vinieron ni los trolls de la Nación, el desplante fue total, la marcada de cancha dejó al gobierno con cara de…»pasó el micro que va p´al Barrio y no paró”.
Ante el plantón, el periodismo menduco buscó fuentes de información sin compromisos, con más libertad. Algunos las encontraron en los intendentes de los municipios, empresarios, funcionarios y políticos de diversas fuerzas que comentaban a todas voces lo que harán para engrandecer la provincia y bla bla o quejas hacia lo que no crece ni se engrandece, que es el presente de un futuro que se ve difícil de llegar .

Dentro de esa vorágine de situaciones planteadas, apareció Lourdes Arrieta, que se llevó la centralidad sin buscarla, lo cual suele ser la forma más atractiva.
Lourdes, la diputada nacional por Mendoza, tiene un destaque principal dentro de la política más allá de la convocatoria mediática provincial y nacional en redes sociales. Llegó temprano, cerca de las 7:30 de la mañana, saludó a todos los que estábamos presentes mientras aún se armaban las mesas. Con su sonrisa amplia, iluminada y amigable saludó a todos los que circulaban, en su gran mayoría periodistas y público que no la tenían registrada, pero que para varios era una persona joven más del lugar.
La prensa especializada le realizó notas, luego llegaron los políticos de distintos partidos y orígenes que si la reconocían y saludaban en gran mayoría, aunque hubo algunos que trataban de evitarla y encima son colegas del Congreso Nacional.

«Estamos en una provincia conservadora donde siempre prima el hombre en vez de la mujer, la mujer es muy resistida y se nos inventa de todo, pero eso es lo que a uno le da más fuerza», sostenía en alguna de sus declaraciones a la prensa.
De esa forma, podemos apreciar porque cuesta muchas veces consensuar leyes que nos beneficien a los ciudadanos ya que si no se saludan afuera difícil es que puedan llegar a realizar los objetivos para lo cual fueron votados. Los libertarios de Buenos Aires le demostraron gentileza y apoyo, no así los mendocinos… igual ella prefirió en soledad saludar a todos, también comentó sobre un futuro partido político y consultaba por como veían desde la provincia a la Nación, algo poco usual que alguien se interese en respuestas.

La diputada Arrieta estuvo parada en un pasillo de entrada no como anfitriona, si no que miraba a los ojos a los ingresantes certificando su presencia y llevando el mensaje de que no está rendida, si no de pie, así como enfrentó a tantos socios al inicio de su mandato y entre criticas diversas.
Su objetivo era esperar al gobernador Alfredo Cornejo y era más fácil que llegara Godot y pasara por el ojo de la cerradura un Mamut a que atravesara por el lugar donde los simples mortales ingresábamos. Pero ella estoica lo quería ver llegar, solo dejó ese lugar para dar entrevistas o para ir a la vereda a escuchar los reclamos de las marchas del Contracarrusel e intercambiar números telefónicos para recibir los reclamos.
No fue a buscar centralidad como Maléfica a una fiesta por no ser invitada, entró por decisión y convicción, se aclara para que no se reprenda a los organizadores ya que ellos habrían cumplido las órdenes al ignorarla.

En estos días, Lourdes Arrieta, confirmó que recompuso su relación con el presidente de la Cámara de Diputados y referente de La Libertad Avanza, Martín Menem. «Él me pidió disculpas en privado y la relación es muy buena», aseguró en diálogo con MDZ. No obstante, pese a recibir insistentes pedidos desde el oficialismo para que vuelva a sumarse al espacio, Arrieta se mantiene firme en su decisión de no regresar. «Tengo coincidencias, pero muchas críticas, como por ejemplo la situación de los abuelos (por los jubilados)», agregó.
Virginia Wolf decía que para alcanzar la libertad femenina se necesita una habitación propia y la dirigente política en cuestión que llegó de la mano de la Libertad Avanza está decida a construirla y pintarla de independencia.
Por Martín Orozco @ojosdvideo
