Mediante un decreto, Macri disolvió la Secretaría de Deportes y se huele un «tufillo» a negociado

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El Gobierno de Mauricio Macri decidió seguir con el ajuste que le pidió el FMI. Ahora, y por decreto, disolvió la Secretaría de Deportes y creó una Agencia.

Según Macri, la medida responde a la necesidad de «un reordenamiento normativo que permita la toma de decisiones y ejecución de las políticas vinculadas al fomento del deporte en forma ágil y eficiente».

Desde el deporte, advierten que el decreto busca poner bienes del Estado al servicio del mercado. El patrimonio inmobiliario que representan los lugares de entrenamiento para atletas, los espacios recreativos y hasta turísticos -terrenos que superan con holgura las 800 hectáreas- y que ahora serán administrados por una Agencia mixta.

La conducción y administración del nuevo organismo descentralizado y autárquico que funcionará en el ámbito de la Secretaría General de Presidencia estará a cargo de un director ejecutivo, con rango y jerarquía de secretario, y un subdirector ejecutivo, ambos designados por el Poder Ejecutivo nacional.

Según se desprende del artículo 4 de la norma, el organismo manejará los ingresos de recaudaciones; ventas, locaciones u otras formas de contrataciones de sus bienes muebles y servicios; lo producido de la organización de eventos; recursos obtenidos de contratos onerosos de concesión, permiso de uso, locación, derechos publicitarios y comercialización de espacios publicitarios de los bienes bajo su custodia; fondos provenientes de la explotación de bienes muebles y de los servicios arancelados; aranceles y tasas que perciba como retribución por servicios adicionales que preste; contribuciones, subsidios, cesiones, herencias, legados y donaciones de bienes muebles que reciba.

 

Desconfío

Claudio Morresi, el exsecretario de Deporte durante el kirchnerismo denunció que «Macri firmó el decreto para hacer negocios» y cuestionó al Gobierno por el DNU que disuelve la Secretaría de Deportes para crear una Agencia que administrará bienes del Estado y que podrían ser vendidos a entidades privadas.

En ese marco, el diputado nacional del Frente para la Victoria e integrante de la Comisión de Deportes, Carlos Castagneto, declaró a Página 12: «Es una locura. Primero le sacaron la plata al Enard, ahora desaparecerá la Secretaría, quieren vender el Cenard que tiene instalaciones que son patrimonio nacional y además privatizar el deporte. Y le digo más, hace unos días vinieron al Congreso dos abogados de la Superliga a hablar de las sociedades anónimas. Porque quieren que los clubes se conviertan en SA”.

Según el DNU macrista, la reducción presupuestaria que sufrirá el deporte argentino –en un año que se realizarán los Juegos Panamericanos de Lima– derivó en un presupuesto de 991 millones de pesos. En tres años de gobierno las partidas destinadas al área bajaron de 1.315 millones de pesos en 2016, a 1.433 millones de pesos en 2017 y a 1.097 millones de pesos en 2018.

«Lo que está haciendo el Gobierno es una vergüenza quieren privatizar el deporte argentino», advirtió por su parte Marcos Milinkovic, el ex jugador de la selección de voley. «Con la agencia se va a aprobar la venta de espacios públicos. Es una locura», describió. «Para que quede claro, esto no pasa por defender a algún partido político,estoy defendiendo el lugar del deportista y la casa del deporte como lo es el CENARD, porque se lo que significa tener nuestro lugar de entrenamiento y un lugar con tanta historia para el deporte nacional», escribió por último en las redes sociales.