El «Modelo Milei» que es «música para los oídos» para el mendocino Alfredo Cornejo empieza a expresar sus resultados… obviamente malos.
A principios de marzo, en plena Vendimia 2024, el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, comenzaba su discurso en el Desayuno de la Coviar agradeciendo la presencia de representantes de la Casa Rosada y la vicepresidenta Victoria Villarruel, y consideró que «demuestra un gobierno sensible con nuestra economía y problemáticas».
Su discurso resultó una cartera llena de elogios al actual Gobierno Nacional «Aspiramos a que el presidente Javier Milei dé vuelta la historia de decadencia de este país. Tenemos esa esperanza», manifestó, y agregó: «No somos de su signo político, no hemos transitado un camino político juntos, pero la Argentina no puede perder cuatro años más y por eso hay que apoyar reformas estructurales que den vuelta la página de decadencia de este país».
Es así que la bicicleta financiera, la licuación de los salarios de los trabajadores y de los jubilados bancaron el modelo económico ajustador del conservador Javier Milei y su amigo Toto Caputo, parando toda la economía con un Estado cada vez más chico que menos se ocupa de la gente… mientras Cornejo asegura «es música para nuestros oídos». Después de nueve meses, empezamos a ver sus resultados!
El informe entregado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) reveló que la pobreza porcentual en el Gran Mendoza alcanzó a más de 500.000 habitantes durante el primer semestre de 2024.
La pobreza porcentual en el área metropolitana de la provincia es, llamativamente, la misma cifra que en el país: 52,9%, la que se traduce en 558.854 mendocinos, correspondientes a 147.662 hogares.
En el caso de la indigencia, se registró que en el Gran Mendoza 145.326 personas (35.758 hogares) están en esta vulnerable situación, es decir, un 13,8%.
La comparación interanual arroja otro dato alarmante: entre el primer semestre del año pasado y el mismo periodo de 2024, hay 121.357 nuevos pobres en el Gran Mendoza.
Este documento también señaló la media de ingresos del mendocino promedio es de 274.164 pesos
Esta situación fue analizada por el economista Carlos Rodríguez, quien resaltó que la recesión económica se ve movilizada por la pérdida del poder adquisitivo más que por el aumento del desempleo en Mendoza.
Todos pobres, menos la casta de Milei
Según el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la pobreza en la Argentina subió a 52,9% en el primer trimestre del año y alcanzó a 24,9 millones de personas en todo el país. Las regiones de mayor incidencia fueron el Noreste y Noroeste.
Está por encima del 41,7 % de finales del año pasado, y del 40,1% de enero-junio del 2023, según se desprende del informe difundido hoy por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Si se compara con el mismo semestre del año previo –lo que es correcto metodológicamente porque en el empleo y los ingresos influyen factores estacionales– resulta que la pobreza dio un salto de casi 13 puntos porcentuales.
En tanto, el Índice de Indigencia, entendido como los pobres cuyos ingresos no son suficientes ni siquiera para comprar la cantidad mínima de comida que permita la subsistencia, se ubicó en 18,1%. A finales del año pasado había trepado al 11,9%, y entre enero y junio del 2023 se ubicaba en 9,3%, por lo que se entiende que escaló 8,8 puntos porcentuales en la comparación con el mismo período del año anterior.
Esto implica que, sobre una población de 46 millones de personas, 24,3 millones son pobres, y entre ellas, 8,3 millones no tienen el dinero mínimo para comprar la comida que les garantice la subsistencia.
El país registró su tasa máxima de pobreza en octubre de 2002, cuando el índice trepó al 57,5 % tras el estallido de la crisis del 2001.
Uno de cuatro niños pasa hambre en Argentina
Las infancias siguen siendo las más castigadas por la situación. El 66,1% de los menores de hasta 14 años son pobres, y lo son también el 60,7% de los jóvenes de entre 15 y 29 años.
Esto significa que no perciben lo suficiente para cubrir sus necesidades básicas. Actualmente, la canasta básica de una familia tipo se ubica en casi $ 940 mil.
Asimismo, el 27 % de los niños comprendidos en ese rango etario, se encuentra en situación de indigencia.
Los números evidencian que uno de cada cuatro niños, pasa hambre en el país, porque sus familias no llegan a cubrir la Canasta Básica Alimentaria.