La gran expectativa que había despertado el remate de productos confiscados por la Aduana argentina en la región de Cuyo se vio confirmada en las últimas horas: en el lugar donde se llevarán a cabo las subastas había esta mañana una cola de más de cinco cuadras, que comenzó a formarse al menos ayer y en la que había concurrentes de puntos lejanos del país, como Córdoba, Entre Ríos y hasta el Gran Buenos Aires.
Roberto Pérez, el martillero a cargo de la subasta, le contó a Clarín que según él sabía, se había acercado al remate gente de Bahía Blanca, Mar del Plata, Córdoba, La Rioja y Tucumán.
La megasubasta está a cargo del Banco Ciudad. Ayer, en el último día de exposición de los 800 lotes en el Puerto Terrestre Mendoza, habían pasado por el lugar unas 2.000 personas a ver los productos y se habían hecho unas 200 ofertas a sobre cerrado.
La subasta, popularizada como el “remate de los iPhone”, por el teléfono de Apple que hasta el año pasado no era comercializado en la Argentina, ofrecerá miles de artículos tecnológicos pero algunos de ellos han quedado desactualizados.
El mayor interés está en los teléfonos marca Samsung, Motorola y iPhone; notebooks, tablets, televisores, cámaras de fotos y equipos de música.
Los precios de los iPhone parten en los 800 pesos. El más moderno que se remata, el de la versión 7, tiene una base de 5.000 pesos cuando cuesta entre 20 y 25 mil pesos en los negocios
En el caso de Samsung, por ejemplo, el modelo J7 (2017) tiene un precio inicial de remate de 800 pesos; un Galaxy Trend Plus (2014) arranca en 1.000 pesos; y un Motorola E, segunda generación (2016), parte en 800 pesos.
Son teléfonos que fueron incautados en la frontera a viajeros, cuando al ser detectados por la Aduana, sus dueños prefirieron perder el producto adquirido a pagar el impuesto correspondiente por haberse pasado de la franquicia de 150 dólares que tiene cada argentino que llega del exterior en vehículo (cuando el viaje es en avión, la franquicia por pasajero sube a 300 dólares).
En la subasta también hay relojes de oro, guitarras eléctricas y acústicas, juegos de palos de golf, tarjetas de memoria, televisores LCD, repuestos de auto, electrodomésticos y equipos para práctica de kite surf.
También hay tres automóviles usados, entre otros productos. Los autos son un Volkswagen Fox 2014, con unos 34 mil kilómetros, que sale a remate en 50 mil pesos más IVA; un Citroen C3 y una Camioneta Nissan.
Fuente: Clarín
