Alicia Beniganza sobre la política en Luján «Cambia Mendoza es una coalición con una mirada colectiva que no quiere aventuras de soberbios egos solitarios»

Actualidad Mendoza

Mientras algunos pretenden resquebrajar la coalición que transformó la provincia de Mendoza desde el 2015, la dirigente del radicalismo lujanino, Alicia Beningaza busca desde su columna de opinión, consolidar un proyecto político con unidad y pluralidad de voces para seguir transformando la provincia y una Luján de Cuyo más equitativa, de vanguardia, pero también con sensibilidad social y de género.

Reflexión para no olvidar: más mirada colectiva, menos egos solitarios

Por Alicia Beningaza*

La esencia de la política es mejorar la realidad del pueblo. Pueden haber variaciones en el medio con distintos colores que den sus matices y diferentes caminos, pero el fin siempre va a ser el mismo: que la gente viva mejor para tener posibilidades de crecimiento con un futuro próspero.

En los últimos años algunos de esos matices y caminos fueron desdibujando la meta y agigantando grietas. Para los gobiernos “K” la institucionalidad fue perdiendo valor, la Justicia cayó a un último plano, la economía se convirtió en un tobogán sin fin y el valor de la palabra dejó de tener sentido de responsabilidad.

La Argentina que tanto nos costó recuperar en el 83 con Raúl, fue quedando en el olvido de alguna dirigencia que desoyó a sus electores priorizando egos y caprichos que taparon una vez más las urgencias de la ciudadanía.

En Mendoza la tarea a partir del 2015 no fue fácil, remontar la desidia administrativa que nos habían dejado fue un trabajo de hormiga que supo hacerse con compromiso, audacia, responsabilidad y sencillez. Las dos gestiones radicales que tuvimos desde entonces son ejemplo de que sí se puede tener una provincia ordenada y que priorice a los suyos, al punto de que con orgullo podemos decir que el #ModoMendoza no es solo un eslógan, es una forma de transformar la energía en trabajo con un solo fin: que los mendocinos progresen a pesar de los embates nacionales.

En Luján, mi tierra, las cosas tampoco fueron fáciles. Después de la gestión k que improvisó y nos sumió en la nada misma, las gestiones de nuestros amigos del PRO fueron un respiro para los vecinos. Se dieron muchos de los avances que esperábamos y aún hay en carpeta muchos por hacer.

Retomando el inicio de la reflexión me atrevo a decir que nuestro fin tiene que estar más claro que nunca, porque mientras algunos se toman el tiempo de medir egos y dirimir las diferencias a “tuitazos” hay vecinos que la están pasando mal. Luján no es solo la versión turística, bonita y amigable por la que nos conocen, el Luján profundo tiene vecinos que no llegan a mitad de mes, comunidades enteras a donde no llega el agua, distritos que necesitan de salitas municipales (ordenanza aprobada 086-P-16) con un servicio de salud más integral y completo, zonas donde es urgente acercar puntos para un acceso rápido a la Municipalidad.

Los derechos humanos de hoy también tienen que ver con la posibilidad de una vivienda digna, el acceso al agua potable, cloacas y veredas, la llegada de internet para una comunicación completa, el cuidado del medio ambiente, un estado local que acompañe el desarrollo porque solo con plazas bonitas y bicisendas no alcanza…

Y, por supuesto, los derechos integrales de las mujeres. En 2016 pudimos dar un salto de calidad en la lucha contra la violencia de género. Los egos también jugaron una mala pasada dejando de lado las urgencias de cientos de mujeres y niños que lo requerían. La creación del Programa de Protección de Género y Familia fue primordial, y necesitaba de la decisión política y sin sesgo machista que en ese momento no acompañó el municipio con la creación del primer refugio para mujeres que sufren violencia de género de la provincia (ordenanza aprobada 337-P-16).

¿Si nos animamos a rearmar nuestra coalición ganadora en el departamento? ¿Si focalizamos nuevamente en los vecinos de TODO Luján, dando prioridad a aquellos en situación de vulnerabilidad? ¿Si repensamos nuestra coalición en una comunidad política plural que acompañe a la par a sus electores mientras trazamos nuestro programa de gobierno 2023 y dejamos la soberbia autoritaria para aquellos que solo responden mandatos personalistas y no al de la ciudadanía?

Desde el radicalismo lujanino estamos preparados para trabajar en conjunto, pero también para tomar la posta y guiar hacia un estado local que sostenga, acompañe y materialice los sueños de cada habitante de este terruño.

Nos quedan pocos meses para salir a pedir votos, démosle a los lujaninos eso que tanto quieren: la posibilidad de una coalición que priorice a los que más lo necesitan y se atreva a soñar con un departamento vanguardista donde el turismo inclusivo, la perspectiva sustentable, de derechos humanos con mirada de género y más sean motivo de orgullo para todos.

Pensemos a Luján unidos para el cambio.

*Alicia Beningaza. Dirigente radical de Luján de Cuyo. Concejala mandato cumplido (2015-2019)