La audiencia convocada esta mañana por la Subsecretaría de Trabajo, a pedido de la Honorable Cámara de Diputados de la Legislatura provincial, para intentar la apertura de un diálogo extrajudicial sobre el intento de desafuero del delegado de Átomo, Jonathan Neira, culminó sin avances ya que la empresa negó las competencias de la Subsecrataría y la Legislatura para convocar a una cociliación de este tipo.El delegado sindical Jonathan Neira, conocido por sus denuncias a la empresa Millán S. A. por el maltrato a sus empleados enfrenta un juicio por desafuero iniciado por la empresa.
El delegado gremial Jonathan Neira explicó que “la empresa se presentó en la Audiencia a través de sus abogados, pero vino sin voluntad de diálogo. Nosotros exigimos que se termine la persecución sindical a los delegados y la empresa sólo manifiesta que piensa seguir con la causa judicial. Se niegan a abrir un dialogo y rechazan a la Subsecretaría de trabajo como ámbito para resolver este conflicto”. En los últimos meses han salido a la luz nuevas y numerosas denuncias de maltrato en esta cadena de supermercados, sin embargo la misma se niega a abrir un ámbito de diálogo, y prosigue en su embestida judicial contra el delegado Neira que denunció públicamente lo que pasaba en la empresa.
Mientras adentro se realizaba la audiencia, afuera se encontraba un nutrido grupo de trabajadores y jóvenes en apoyo al reclamo contra el maltrato y la explotación en Atomo Supermercados que fue trasmitido en vivo por radio abierta a través de la red de medios comunitarios, Radio La Mosquitera y Cuyum. Se hicieron presentes para solidarizarse con el reclamo delegados de base de Ate y Sute, el Sindicato de Prensa y delegados de Cuyoplacas. También se hicieron presentes los legisladores provinciales como la Senadora Noelia Barbeito (FIT)y los diputados Patricia Galván (FPV), Lautaro Jiménez, Macarena Escudero y Cecilia Soria (FIT).
Neira había explicado en otro momento cómo se llegó a esta situación: “Cuando fui elegido delegado, las condiciones laborales eran peor que ahora, no se pagaban las horas extras, los francos y las vacaciones, no te daban ropa, no había salida de emergencia y la mercadería se almacenaba al aire libre, se llovía media sucursal, no teníamos ningún lugar para desayunar y un solo baño, además del maltrato constante de jefes y supervisores. Así que hicimos la denuncia en la subsecretaria de trabajo y en algunos medios. Eso tuvo repercusión y fueron los inspectores a verificar e intimaron a la empresa para que modifique la sucursal, aunque aún seguimos reclamando porque no se pagan las extras y a 13 compañeros no les han dado las vacaciones correspondientes al año pasado. Luego se hizo público un video donde la señora Elodia Millán viene a “apretarme” para que termine con mi actividad gremial.”