Mientras los grandes empresarios brindaban en el Agasajo Vendimial con Cornejo, afuera reclamaban contra la persecución sindical

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En esta intensa jornada de sábado, el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, participó del Agasajo de Vendimia organizado por Bodegas de Argentina en Bodega Los Toneles junto a funcionarios nacionales y los grandes dirigentes empresariales representativos que manejan, a su gusto, la industria ícono de la provincia, la vitivinicultura.

Participaron el ministro de Agroindustria de la Nación, Luis Miguel Etchevehere; el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales; el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey; el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Emilio Monzó; Javier González Fraga, presidente del Banco Nación, y la subsecretaria de Hábitat y Desarrollo Urbano, Marina Klemensiewicz.

Walter Bressia, presidente de Bodegas de Argentina y anfitrión, dio la bienvenida e hizo un diagnóstico de la situación de la producción y el vino mendocinos en el contexto provincial, nacional e internacional. «El desafío es grande pero alcanzable y nuestra meta es volver a posicionar a nuestro país entre los principales proveedores de vinos de calidad con una excelente relación calidad/precio en el mundo».

Está claro que el deseo de aquellos grupos empresarios amigos del gobierno, que manejan el monopolio del sector a cuesta de los trabajadores con salarios bajos, contratos precarios y de fagocitarse a los pequeños y medianos productores que chapucean frente a la crisis, ponen las reglas de juego e imponen sus valores a su propio beneficio con un Estado cómplice, permiten que la celebración y el agasajo sea mutuo, puertas adentro.

No obstante, puertas afuera de la Bodega Los Toneles, la situación era muy diferente, ya que los trabajadores y trabajadoras de Átomo Supermercados hicieron todo lo posible que ese «agasajo» caiga muy pesado.

La medida de protesta gira en torno a la solidaridad y acompañamiento de Jonatan Neira, ex delegado de los trabajadores y trabajadoras de Átomo Supermercados, que desde años viene sufriendo una fuerte persecución sindical, un impune avasallamiento de los derechos laborales y hasta de maltrato físico.

Cabe destacar que la familia Millán, dueña de la bodega que hoy recibe al gobernador Cornejo, también es propietaria de la cadena de supermercados que persigue a sus trabajadores por organizarse por sus condiciones laborales.

Por el gran poder político que tiene la empresa con el gobierno y sus amistades, hace que los Millán se manejen con total impunidad frente a los trabajadores y las trabajadoras mendocinas. En la puerta de la bodega Los Toneles, donde se realizó la protesta, el trabajador de la cadena Átomo, Jonahan Neira, señaló «Hoy nos estamos manifestando en la puerta de la bodega Los Toneles donde yace el agasajo vendimial, donde se junta el cartel de los políticos a brindar con los Millán. Nuestra protesta es en repudio a la persecución de los trabajadores y porque la Justicia falló a favor de la familia Millán, donde me quitaron el fuero como delegado y próximamente voy a perder el trabajo. Por eso estamos acá, para que todos se enteren quiénes son los Millán, que tienen su pauta y sus amigos en el gobierno y que dejan pasar todo, mirando hacia otro lado los reclamos de los trabajadores».

Recientemente, la Sala Segunda de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza, con el voto de los jueces Valerio y Palermo, rechazó el recurso del delegado gremial Jonathan Neira contra el desafuero impulsado por la empresa Millán SA. Frente a esta resolución, Neira expresó su total desacuerdo a la medida «Que me quiten los fueros significa que ya no podés representar más a tus compañeros, que proximamente te van a despedir con causa».

«Para mis compañeros representa una derrota porque seguramente todos los logros que obtuvimos como delegado van a volver atrás porque los Millán tienen sus ganancias en la explotación de los trabajadores», concluyó el ex delegado de Átomo.

En tanto, los legisladores del Frente de Izquierda, con la dirigente Noelia Barbeito al frente, acompañaron la acción y manifestaron su repudio a la persecución contra Jonathan.

Millán: El hábito de apretar con la política del miedo

Jonathan Neira es perseguido por la patronal por defender a sus compañeros y compañeras de trabajo. Las denuncias de trabajadores y trabajadoras de Átomo, sobre las condiciones laborales en las que trabajan son constantes: “somos perseguidos y hostigados por superiores. Tenemos faltantes de ropa y calzado de trabajo, tenemos traslados de sucursal injustos”, relatan algunos trabajadores. “Cuando te querés tomar vacaciones, te trasladan a otra sucursal y ahí te empiezan a pedalear las vacaciones para que se pase el tiempo. Cuando las reclamás, te dicen que legalmente no se puede por qué se perdió el plazo. Acá también perdemos derechos”, cuenta Jony sobre algunas de las denuncias más comunes que se escuchan entre los trabajadores.

“Si querés reclamar por la vía legal empiezan con presiones y aprietes para que no lo hagas. Quieren que pensemos que si reclamas puede ser peor, como si estuviera mal pararse de frente y reclamar por nuestros derechos”, continúa Jonathan. Otro de los reclamos que hacen los trabajadores es por los permanentes descuentos que reciben en sus salarios: faltantes de caja, pérdidas de comprobantes de pagos con tarjeta, etc. Todos descuentos en el salario del trabajador. Además denuncian que la empresa utiliza las suspensiones para que muchos trabajadores pierdan el presentismo. “La suspensión más el presentismo son $ 4500 menos en el sueldo de ese mes”, cuentan.

Átomo Supermercados tiene más de 100 sucursales, en donde trabajan mas de 4 mil jóvenes, y en todas se repiten estas denuncias: “te hacen trabajar 12 hs o los fines de semana y en lugar de pagarte las horas extras, te dan medio franco. Ahí en donde está la ganancia de esta empresa que lucra con el sudor, la sangre y las lágrimas de los compañeros”, denuncian.