Luis Petri apuntado por el desastre en IOSFA que quintuplicó su deuda: mucho desfile militar pero poca atención al afiliado

Actualidad Mendoza

IOSFA es Instituto de Obra Social de las Fuerzas Armadas (FFAA) y de Seguridad; y se encuentra en una situación complicada pese a la exhibición personal de fervor que realizan los ministros Patricia Bullrich y Luis Petri, ex compañeros de binomio de Juntos por el Cambio, hoy día colonizados por La Libertad Avanza.

La Obra Social, desde su creación en 2013, se encuentra intervenida por la política. Ya tuvo 6 presidentes designados por ministros de Defensa. Cada uno de ellos quiso imponer su impronta, trajo gente propia con salarios a pagar con la recaudación destinada a salud, todos han realizado múltiples auditorías y análisis sobre la gestión anterior, realizaron -o intentaron realizar- cambios en la estructura orgánica y en el funcionamiento. Blablablá.

«Sin embargo, ninguno de ellos se ha mostrado comprendió y resolvió la esencia tan particular de ésta obra social, ni demostró mayor compromiso con un mejoramiento de la misma»: esto es lo que se escucha desde hace mucho tiempo.

Los afiliados sabían que, en sus obras sociales de origen, podían confiar en una institución conducida por pares; hoy creen que desapareció esa integración y pasó a formar parte de una masa impersonal de usuarios necesitados de atención.

Los jefes de las fuerzas -que utilizaban a las obras sociales como un elemento de conducción, manteniendo un diálogo directo con los directores de las mismas-, perciben que no tienen esa importante herramienta.

Desde su creación, IOSFA ofrece un nivel de desorganización difícil de imaginar en instituciones verticales y ejecutivas:

  • No existen estadísticas,
  • No hay orden,
  • No hay motivación y
  • muchas falencias sobre las que las diferentes conducciones políticas no han puesto interés ni idoneidad.

El mendocino Oscar Sagás, asumió en diciembre como el nuevo titular de IOSFA, la obra social de las Fuerzas Armadas de la Nación, una de las principales del país teniendo en cuenta su cantidad de afiliados. Fue Luis Petri, ministro de Defensa, quien ungió a Sagás para que se haga cargo del Instituto de Obra Social de las Fuerzas Armadas y de Seguridad.

Sagás, el médico que fue subsecretario de Salud de Mendoza en la gestión de Ana María Nadal, y que luego pasó a formar parte de los equipos de Luis Petri -cuando este se presentó como precandidato a gobernador- se llevó a trabajar con él a la obra social del Ejército a dos mendocinos.

Uno de ellos es el histórico dirigente demócrata Diego Arenas, quien hasta hace poco tiempo integró la Inspección General de Seguridad. Arenas es el asesor letrado. Pero, además, quien integra los equipos de Sagás es el comunicador Emiliano Follis, quien fue jefe de prensa del Ministerio de Salud.

Ambos son sus asesores en el directorio del Instituto de Obra Social de las Fuerzas Armadas y Seguridad (IOSFA).

La obra social de las Fuerzas Armadas y de Seguridad informó este viernes que su titular, Oscar Sagás, presentó su renuncia. En su lugar, asumirá Roberto Fiochi, quien hasta ahora ejercía el cargo de presidente del Instituto de Ayuda Financiera para Pago de Retiros y Pensiones Militares (IAF).

«La tarea encomendada por Ud. –expresa la carta dirigida al ministro Petri– fue sumamente compleja y desgastante. En el convencimiento de que IOSFA es una organización que necesita de profundas reformas, he podido comprobar que la mentalidad de las autoridades de la FF.AA. y de Seguridad a las que servimos, no está dispuesta a aceptar que tales transformaciones resulten lideradas por alguien que no pertenece al ámbito militar», señaló en su renuncia el médico ex subsecretario de Salud de la provincia de Mendoza.

En ese mismo texto, Sagás señala la «especial situación del sector de la salud» que afecta a dicha obra social y que desde enero, medicamentos y prestaciones de salud «aumentaron más de un 300%»; mientras que los ingresos a IOSFA «alcanzaron solo el 80%». En medio de los cuestionamiento a su labor y al funcionamiento de la cobertura de salud, aseguró que «de no haber sido por las medidas tomadas oportunamente durante mi gestión, la situación económica y financiera de la Obra Social hoy sería crítica».

Asimismo, en la carta de renuncia, el mendocino sostiene que advirtió «situaciones que rayaron lo delictivo», lo que generó diversos sumarios administrativos y denuncias penales. «No íbamos a permitir actos de corrupción, por mínimos que fueran», manifestó. También criticó la falta de recambios en la línea gerencial y la demora en la designación de los Directores Vocales, claves en la toma de decisiones más complejas.

Desde hacía algunos meses, Sagás estaba vinculado a una polémica por el estado de las cuentas del Instituto de Obra Social del Ejército. Había circulado una carta de directivos de la institución a través de la que alertaban sobre esta situación y llamaban a “terminar con los vicios de la política” y devolver la obra social a la conducción del afiliado. 

A mediados de octubre, la obra social del personal militar y de las Fuerzas de Seguridad (IOSFA) fue noticia por quintuplicar su deuda durante la gestión liderada por Javier Milei. Incluso, se prevé que terminará el año con un pasivo superior a los 122 millones de dólares.

El crecimiento exponencial del pasivo quedó en manifiesto, semanas atrás, en una nota firmada por casi todo el directorio de la organización (muchos de ellos, altos rangos de las fuerzas). Sobre la deuda, la nota relevó que a diciembre del año pasado alcanzaba casi 18.600 millones de pesos y que ya para mayo de este año había trepado a más de $ 57 mil millones, en tanto que al 30 de septiembre se situaba en más de 97 mil millones de pesos. En esa línea, le advirtieron a Sagás que el deterioro del IOSFA se verifica luego de alcanzar «un cauto equilibrio» en las cuentas al cierre del 2023.

Sobre el cierre, los directivos reclaman la necesidad «en forma urgente» de realizar diversas medidas de contención del gasto» y también la elaboración de un «plan de contingencia» para enfrentar la situación actual, poniendo el foco que puede existir un importante riesgo en la continuidad de las prestaciones médicas, sociales y de recreación. Por todo ello, demandaron una auditoría.

La debacle de la prestadora se da un contexto en el que el Gobierno nacional intervino a más de media docena de obras sociales sindicales, alejando «supuestos déficits inmanejables, falta de prestaciones e irregularidad». A pesar de las críticas, Sagás asegura que logró «mejoras tangibles» en todos los ámbitos de la administración –circuitos de compras, contratos, prestaciones inconvenientes para la institución– y sostiene que su gestión «no ha podido conformar a todos los sectores».

«Entiendo que con mi salida, contribuyo a disipar tensiones con algunos sectores de las Fuerzas que no logran entender el momento histórico por el que atraviesa el país, no dimensionan los vientos de libertad que soplan en nuestra Nación y aún dubitativos de la enorme transformación y modernización que está llevando a cabo el Presidente Javier Milei. Lamento dejar de pertenecer a su equipo de trabajo, pero lo hago convencido que es lo mejor para su gestión», sentenció el ahora ex Presidente, quien retornará a la provincia de Mendoza para seguir trabajando en el área de salud.