De «el relato» a los hechos hay mucho trecho. Por más discursos fervorosos se dan a favor de la «Eficiencia del Estado», en contra de «Un Estado Bobo» y bla bla… la realidad marca que los 8 años de los gobiernos de Cambia Mendoza, alternados entre Alfredo Cornejo y Rodolfo Suarez, solo lograron aumentar el empleo público, con un alza casi del 20 por ciento, y una leve recuperación del empleo privado muy por debajo de sus pares de la región cuyana. A esto se le suma las bajas remuneraciones que se les otorgan a los trabajadores tanto del sector público como del privado, siendo Mendoza una de las provincias que registra mayor caída del salario real. Potenciado con la inflación y la licuación de los salarios por parte del gobierno actual de Alfredo Cornejo, con paritarias a la baja y incrementos impositivos y cuadros tarifarios en servicios.
En su informe anual de 2023 y perspectivas para 2024, el IERAL (Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana, de la Fundación Mediterránea), coincide en señalar que el empleo privado formal en Mendoza está estancado desde hace 10 años, mientras que va creciendo la informalidad y los salarios “han estado cayendo en poder adquisitivo en una magnitud superior al promedio nacional”.
Entre 2011 y 2022, en un período de alta inflación y bajo o nulo crecimiento de la economía argentina, en general, el empleo público nacional, provincial y municipal creció más de diez veces más rápido que el empleo privado registrado. En tanto, ese dato en la provincia de Mendoza casi se duplicó, llegando a ser de un aumento del 19 por ciento.
Además, en solo 1 de los 24 distritos de nivel provincial la tasa de crecimiento del empleo privado registrado superó la de empleo público: Neuquén, evidencia del peso de Vaca Muerta, formación geológica de la era jurásica descubierta en 1931 por el geólogo norteamericano, afincado en Mendoza, Charles Edwin Weaver.
De hecho, el peso del gasto en personal, que en 2015 explicaba el 60% de los ingresos corrientes provinciales, en 2022 explicó “solo” el 47 por ciento. Esto significa que hay más empleos, pero peor pagos. “Detrás de la caída del peso del gasto en Personal, seguramente se tiene una disminución del salario real promedio”, dice el informe de Marcelo Capello, investigador y vicepresidente del IERAL de la Fundación Mediterránea
El fenómeno no es igual en todos lados. En el período 2015-2022 el aumento del gasto en personal fue muy fuerte (descontada la inflación) en San Luis (63%), San Juan (27%), Neuquén (25%) y Salta (19%). “En cambio, Mendoza, Jujuy, Santa Cruz y Córdoba exhiben caídas acumuladas de dos dígitos en el gasto en Personal para igual período: 28%, 20%, 18% y 12%, respectivamente”, dice un pasaje del trabajo.
El poco empleo registrado privado en la provincia de Mendoza
En base a la información publicada por el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación vinculada a las bases del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), CEPA realizó un informe que analizó la cantidad de personas trabajadoras registradas en el sector privado en la provincia de Mendoza, en junio de 2023 y su evolución desde la aparición del COVID-19.
Los datos relevados por el Ministerio de Trabajo muestran que en el mes de junio se crearon 775 puestos de trabajo registrados en el sector privado de la provincia de Mendoza, lo cual implica un crecimiento de 0,3% con respecto al mes de mayo. Con este crecimiento Mendoza sigue acoplada a lo que ocurre a nivel nacional, donde se generaron 17 mil puestos de trabajo registrados en el sector privado durante el mes de junio de 2023 (0,3% más que en mayo 2023).
Luego de la doble crisis de empleo (con el Gobierno de Cambiemos y luego con la pandemia), al mes de junio de 2022, se recuperaron la totalidad de puestos de trabajo perdidos en pandemia, aunque la provincia sigue estando por debajo de los niveles previos a la crisis del Gobierno de Cambiemos registrados en abril de 2018.
Al mes de junio de 2023, se recuperaron 19.458 puestos de trabajo desde el mínimo producido por la pandemia del COVID-19 (agosto 2020).
Previo al inicio de la pandemia, el empleo privado ya se encontraba en una situación crítica: la crisis del Gobierno de Cambiemos significó la destrucción neta de 6.886 puestos a diciembre de 2019(y 7.441 al mes de febrero de 2020). Al mes de junio de 2023 faltan recuperar 1.586 puestos para llegar a los niveles de empleo previos a la crisis del gobierno de Cambiemos -a diferencia de la media nacional que ya recupero los niveles de abril de 2018-.
El mes en análisis muestra resultados positivos respecto al mes anterior, manteniendo la tendencia de recuperación de empleo. A su vez, los datos de la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL), anticipan datos positivos para el mes de julio.
Asimismo, a pesar del amesetamiento de la actividad registrado entre junio de 2022 y junio de 2023 (-4,4%), se generaron 5.959 puestos de trabajo registrados en ese mismo período. Sin embargo, en los meses de marzo y abril, se registró una pérdida de 1587 puestos en total.
En resumen: en junio de 2023, el empleo registrado privado en la Provincia de Mendoza registró un crecimiento de 775 puestos. Con este resultado, se han recuperado 5.855 puestos por encima de la cantidad de pre-pandemia. En el mes de junio se mantiene la recuperación de empleos del mes de mayo, pero a diferencia de la media del país, Mendoza no ha logrado recuperar la totalidad de puestos de trabajo perdidos durante la crisis del gobierno de Cambiemos.
A nivel regional, Mendoza forma parte de las únicas tres jurisdicciones cuya recuperación del empleo privado registrado post-pandemia no alcanza los niveles previos a la crisis del Gobierno de Cambiemos de abril de 2018. La provincia logró recuperar el nivel de empleo pre-pandemia entre once y veinte meses después que San Juan y San Luis, respectivamente.
Evolución del promedio salarial del empleo registrado privado en términos reales.
Las estadísticas del SIPA aportan datos sobre la evolución de la remuneración promedio de los salarios del empleo registrado privado por provincias.
A continuación, y a efectos de ilustrar la realidad actual en materia salarial, se presenta un gráfico que da cuenta de la evolución, en términos reales, del promedio salarial en la provincia.
Como se puede observar, el promedio del año 2022 se encuentra 4,1 puntos porcentuales por debajo del promedio de 2019, en tanto que el nivel de junio de 2023 (último dato disponible a nivel provincial) se encontró 4,6 puntos porcentuales por debajo de junio de 2019.
A nivel sectorial, en Mendoza, los cinco sectores que mayor crecimiento de la cantidad de puestos de trabajo registrados en el sector privado registraron entre el cuarto trimestre de 2020 y el cuarto trimestre de 2022 son: Construcción (+30,6%), Hotelería y Restaurantes (+27,0%), Servicios Inmobiliarios (+18,0%), Comercio (+11,4%) y Electricidad, Gas y Agua (+9,7%).
No obstante, en la actualidad del Gobierno de Javier Milei y con una obra pública parada, sumado a la caída de la actividad en el sector de la construcción y el turismo, estos datos fueron cayendo en picada e indudablemente ya son otros. Es así que la provincia de Mendoza atraviesa una severa crisis en el sector de la construcción, que ha resultado en el despido de cerca de 20.000 trabajadores en los últimos tiempos. Solo en el transcurso del año 2024, entre 7.000 y 8.000 empleados han sido cesanteados, de acuerdo con la información proporcionada por la Cámara de Empresas Constructoras Independientes. Este número alarmante pone de manifiesto las dificultades económicas que enfrenta el sector, una pieza clave para el desarrollo infraestructural y económico de la región.
¿Por qué Mendoza está entre las provincias con salarios más bajos?
Aunque en muchas ocasiones Mendoza es equiparada con provincias como Córdoba y Santa Fe, en lo que al nivel de salarios se refiere está más cerca de las del NEA o el NOA. Según datos del Centro de Estudios para la Producción, del Ministerio de Economía de Nación, los sueldos del sector privado registrado de los mendocinos están en el noveno puesto entre los más bajos del país.
Los números más recientes corresponden a noviembre de 2023, cuando en Mendoza el salario bruto promedio por puesto de trabajo asalariado registrado alcanzaba los $427.865. La provincia con los sueldos más bajos era Santiago del Estero, con $343.724. Y entre ésta y Mendoza se encontraban: Misiones ($367.643), Tucumán ($381.728), Chaco ($392.728), Corrientes ($396.430), Formosa ($402.716), La Rioja ($406.596) y Catamarca ($407.005).
Los salarios más altos del país, en tanto, estaban en Tierra del Fuego ($724.176 en noviembre), Río Negro ($575.101), Buenos Aires ($518.232) y la mencionada Santa Fe ($502.109).
Un aspecto relevante es que, cuando se toman los sueldos registrados tanto del sector privado como el público, Mendoza cae al puesto siete entre las provincias con ingresos más bajos. Con $423.874 en promedio por puesto de trabajo, sólo es precedida por La Rioja, Santiago del Estero, Jujuy, Tucumán, Catamarca y Chaco.
Los datos más antiguos disponibles en la plataforma del Centro de Estudios para la Producción permiten apreciar el desmejoramiento que se ha producido en los últimos 10 años en este sentido. En noviembre de 2014, los salarios privados registrados de Mendoza estaban en el puesto 13 entre los más bajos (en el punto medio), con 12 provincias con remuneraciones más bajas y 11 con ingresos más elevados.
Y cuando se consideran los sueldos en blanco del sector privado y público en conjunto, pasaba a estar en el lugar 14, con 13 provincias con salarios más bajos y 10 que tenían ingresos más altos, y se encontraba un escalón más abajo que Santa Fe, dos que Córdoba y tres que Buenos Aires.
Nicolás Aroma, director del Centro de Economía y Finanzas de Mendoza (CEFI), explica que las causas de que Mendoza esté en los últimos puestos del ranking salarial a nivel país se vinculan con “una economía que ha perdido relevancia y cada vez es más chica, o sea tiene menos capacidad de producción de bienes y servicios”.
El economista detalló que esto significa no solamente que no genera empleo, sino que deprime los salarios. Añadió que, además, hay una política del Estado provincial de “planchar” las remuneraciones de los empleados públicos, lo que lleva hacia abajo también a los sueldos privados.
Aroma sumó que hace un largo tiempo que la economía provincial no viene bien y que, vinculado con las finanzas públicas, el Gobierno “ha asumido un rol absolutamente pasivo en esto”. Explicó que no existe crédito y falta inversión pública, y que, en definitiva, las causas de que Mendoza no tenga buenos salarios responden a que la provincia está estancada y los sueldos tienen el mismo destino.
Por Julián Galván
Con información de Infobae – CEPA – Actividad Económica