Inteligente estrategia de El Adolfo: Hizo filtrar un audio para mandar un mensaje directo a «los traidores»

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La histórica derrota por 19 puntos a manos de Cambiemos en San Luis, caló hondo en la dinastía de los Rodríguez Saá quienes, sedientos de revancha, prometieron como paso inicial impulsar una “limpieza de traidores”.

En una estratégica jugada de ajedrez, actividad muy popular en la tierra de los puntanos (e incluso aplicado en el sistema educativo provincial), El Adolfo hizo una gran jugarreta mediática que se expandió hasta en los medios nacionales, para mandar un mensaje directo a sus militantes «traidores», provocando una implosión dentro del peronismo puntano, generando caos, miedo y desconfianza entre sí, al mejor estilo Frank Underwood.

«Traición», tales fueron las palabras empleadas por el senador nacional y candidato a la reelección, Adolfo Rodríguez Saá, hermano del gobernador Alberto Rodríguez Saá.

“Sonia, en cualquier momento tendrás novedades. Voy a pensar cómo hacemos la estrategia para limpiar de traidores y volver a ser la fuerza invencible que siempre fuimos”, sostuvo el exmandatario provincial, a través de un audio que llegó a dirigentes del peronismo puntano.

En el mismo mensaje el legislador abogó por la recuperación tras la a derrota, por medio de una metáfora futbolera: “Vamos a jugar el próximo partido también de locales, no nos tenemos que dejar ni que el árbitro nos haga trampa ni que los jugadores nos golpeen; vamos a contraatacar y nos vamos a preparar”.

Más virulento es otro audio que también se conoció este miércoles, y pertenecería a la mujer destinataria del mensaje inicial de Rodríguez Saá, a quien el senador llamó por el nombre “Sonia”.

“Los pobres, los humildes y la masa obrera votaron a Adolfo. Los que no lo votaron fueron los funcionarios, intendentes, concejales y los atorrantes de candidatos sentados mientras el pueblo peronista se rompía el culo laburando”, apuntó la dirigente del PJ puntano.

Acto seguido, lanzó una dura advertencia: “A los abogaditos y nenes bien se les acabó; ahora, manda la masa obrera con Adolfo, los demás no son más que chicha y limonada”.

“Ahora van a conocer lo que hace el pueblo de San Luis, traidores”, insistió, y descargó si ira con una grave acusación: “Por dos monedas se vendieron. Judas, traidores. Ya van a ver con la plata y la droga que recibieron, traidores, atorrantes e hijos de puta”.

El Adolfo recurrió a una hábil maniobra para empezar a marcar quiénes son los alfiles «leales» y quiénes son «los rebeldes» dentro del tablero de las dependencias públicas provinciales, donde alguna vez han respondido a las órdenes de su ex gobernador Claudio Poggi. El silencio es total en los pasillos institucionales. Su gente tiene miedo a represalias y justamente el miedo sirve también para adoctrinar.

Saquen sus pochoclos, amigos! Esto recién empieza. Si estos hermanos dan vuelta la elección en octubre, no quedará otra que sacarse el sombrero ante semejantes estrategas.

 

La repercusión mediática