En este finde vendimial, el cornejismo torpemente se dejó ver sus cartas y quedó en evidencia su estrategia y cuáles son sus «enemigos favoritos».
Uno de los momentos claves fue el cercamiento que hicieron los Cornejo’s boys a las visitas de los dos referentes importantes del PRO Nacional y precandidatos presidenciales mejor posicionados dentro de Juntos por el Cambio, como son Horacio Rodriguez Larreta y Patricia Bullrich. En medio de la muralla cornejista… por algún huequito trataba de asomarse el Omar De Marchi, pero sin dudas, el manejo protocolar del radicalismo del ex gobernador cercó toda posibilidad, para dejarlo al lujanino casi fuera de juego. Cornejo salió en todas las fotitos de los referentes nacionales del PRO… Omar solo con la cabeza gacha

Algo similar hicieron los Cornejo’s boys con la organización del desayuno de Coviar del sábado pasado, donde los medios periodísticos críticos a la gestión cornejista casualmente se les «bajaban» las acreditaciones para cubrir el evento. Lo mismo sucedió con las invitaciones a los dirigentes provinciales y nacionales. Algunos a los codazos y tras comerse una larga cola, finalmente pudieron entrar, pero la organización trazó dos grupos definidos que claramente pasaron directos: los de Cornejo y por el otro, el kirchnerismo.

Es así como el sector camporista con Wado de Pedro y Anabel Fernandez Sagasti, pudieron estar muy bien instalados y verse… para que posteriormente Alfredo Cornejo pueda lucirse ante la prensa local con sus automáticas declaraciones «de manual» contra el kirchnerismo que habitualmente desliza.

Cornejo necesita de Anabel y Anabel necesita de Cornejo. Por eso, ambos deben sobrevivir para seguir manteniendo el juego de la polaridad. Cornejo sabe muy bien, sumado a un fino y millonario trabajo propagandístico, que el electorado mendocino es Anti K y que teniendo a Anabel arriba del ring, con un techo definido de 25 puntos, le rinde para seguir sosteniendo su poder durante años. A Cornejo no le sirve un Petri, un De Marchi, ni un Vadillo, porque le come votos de su electorado y lo debilita.

En cambio, La Cámpora termina siendo funcional a ese juego e inclusive le permite hacer su propio kiosquito dentro del manejo del peronismo mendocino. La elección termina siendo una pantomima entre un Cambia Mendoza ganador y un peronismo a la deriva que siempre pierde… pero que también hace el juego para diluir la posibilidad de que pueda fortalecerse una tercera fuerza que tenga la posibilidad de destruir el jueguito de ambos «socios».
Así como el cornejismo tiene de rehén al radicalismo mendocino y no lo deja crecer, La Cámpora hace lo mismo y tiene al peronismo mendocino agarrado del cuello. Ambos son muy parecidos en sus estrategias y formas de pensar. Cornejo tiene en su genética su pasado de Radical K y el legado de las enseñanzas de «Manejo de poder» de su amigo santacruceño Nestor.

Casi con desesperación, a nivel nacional La Cámpora necesita una «Cristina Candidata» para la supervivencia del mismo espacio político. Sus líderes ya perdieron esa refrescante «juventud» de militancia y se convirtieron en conservadores funcionarios nacionales con poco arraigo en el electorado y con corto futuro si no cuentan con la varita mágica de su hada madrina.
Por ejemplo, un niño pródigo del camporismo es Wado de Pedro, que amaga con una candidatura presidencial, popularmente mide un 5 por ciento en las encuestas. Por eso necesitan de Cristina! Sin Ella, La Cámpora se diluye… el Cuervo pierde las plumas y Máximo termina en su mínima expresión. El clamor de «su regreso» no es de todos los argentinos, sino del cristinismo y su necesidad de prenderse a la cartera de Cris en las listas electorales.

Lo mismo sucede en Mendoza. Ya se trabaja para «el operativo clamor» (Casi como hizo Cornejo hace una semanas atrás) para que Anabel sea nuevamente candidata… ¿Será «la eterna carta electoral» del peronismo menduco?
La Fernandez Sagasti intentará ser nuevamente la figura de «unidad» del peronismo en Mendoza. Aunque en realidad, hay otra cara de la moneda, es la figura clave que le permita sostener a La Cámpora en el peronismo de Mendoza y en los lugares claves de la Legislatura provincial y los concejos deliberantes. Una butaca preferencial que le permita negociar directamente con el cornejismo, tal como lo ha hecho durante estos años.

Anabel TIENE QUE SER CANDIDATA. Porque la aparición en la escena política menduca de la rivadaviense Gaby Lizana, muy cercana en lo politico y en lo familiar con el ministro de Economía Sergio Massa, abrió otro camino paralelo para llegar directamente al Gobierno Nacional. Hecho que en la era Pre-Massa solo los intendentes debían pasar antes por el peaje «Anabel», para llegar a Nacion y pedir obras, biyuya, etc. Al haber una colectora, Anabel empieza a cotizar en la provincia un poco menos para el peronismo que empieza andar solito.
En caso de una interna. La camporista tendrá un sparring flojito como el ignoto Martin Hinojosa, que el pueblo mendocino poco conoce en la calle, pero que podría funcional para depurar a los peroncitos disidentes.
El escenario soñado de Cornejo estaría a punto caramelo para el mismo cornejismo y el camporismo, como así también para los periodistas mendocinos que sacan rédito económico de esta grieta: Cornejo en el ring y Anabel con los guantes puestos, ya estaría una Mendoza tranquila para que empiece La Edad Media de una provincia feudal.
¿Los mendocinos y mendocinas tendrán el coraje de patear el tablero y romper el juego de estos «socios»?
Por Julián Galván
