El sector feminista del Partido Obrero de Mendoza, denominada Plenario de Trabajadoras, cuya figura más importante de este sector es la diputada nacional Soledad Sosa, desarrolló un fuerte comunicado contra la gestión del gobernador mendocino Alfredo Cornejo y su desacertada política sobre la violencia contra las mujeres, incluyendo el episodio desafortunado que incluye al ex ministro de Salud Rubén Giacchi. que lo convirtió en un escándalo con la imputación por el cargo de lesiones leves y que enfrenta una pena de 6 meses a 2 años tras las rejas. A continuación reproducimos el comunicado:
La punta del iceberg de un régimen contra las mujeres
Pese a este intento de disociar «lo personal de lo político», es evidente que la salida del ministro representa una crisis de gabinete para el Frente Cambia Mendoza y constituye un golpe al ala radical a la que pertenecía. La gravedad del asunto no sólo estriba en que un funcionario de primera línea protagonizara un acto de barbarie: de Giacchi dependía la política contra la violencia de género de toda la provincia, ya que la Dirección de Diversidad y Género, encargada de atender la temática, está subsumida al Ministerio de Salud y Desarrollo Social. El ex ministro protagonizó numerosos anuncios en esta materia y fue el primero que adhirió al Plan Nacional de Acción para Erradicar la Violencia que lanzó Fabiana Túñez desde el Consejo Nacional de la Mujer. «Se debe desandar en prácticas machistas incrustadas en nuestra sociedad”, declaró Giacchi meses atrás, en el centro de la tormenta por oponerse a sancionar la emergencia en violencia de género. La manipulación excede a la incoherencia personal, no hay noticias de los refugios ni de la asistencia económica ni de ninguna medida concreta de las largamente anunciadas por el ex ministro.
Consultada por la evidente paradoja, Silvina Alfunso, la director del área de diversidad y género dijo: «He perdido la capacidad de sorpresa», seguramente curada de espanto luego de que Libres del Sur, espacio al que pertenece, se integrara al gobierno de Alfredo Cornejo junto con el PRO, el Frente Renovador de Massa y la UCR. Esta funcionaria, muy cuestionada ante el recrudecimiento de la violencia contra las mujeres en Mendoza, intentó salvarse meses atrás al adjudicarle al movimiento Ni una Menos el aumento de los femicidios «como una reacción machista al proceso de autonomía de la mujeres». La burocracia sindical también dio la nota, ya que la salida del ministro se dio en el marco de las discusiones paritarias del ámbito de la salud. «No vamos a opinar sobre un tema personal», dijo la secretaria general de AMPROS (Asociación de Profesionales Mendocinos) quien caracterizó que la salida de Giacchi «es una pérdida».
El caso de Giacchi se suma a una serie de designaciones de personal conocido por sus posiciones enemigas de los derechos de las mujeres tanto en el terreno personal como en el político. Es el caso de la designación del juez Valerio en la Suprema Corte de Mendoza a pedido del gobernador Cornejo, quien ganó el puesto pese a la oposición del movimiento de mujeres gracias a los votos del PJ en el Senado. El Plenario de Trabajadoras tuvo que realizar una campaña pública de denuncia contra la designación del Comisario Esquivel que había sido designado como jefe departamental de la Capital pese a que acumulaba denuncias por violencia de género en su contra.
Resulta indispensable poner en pie un Consejo Autónomo de la Mujer, con independencia política y económica, que tenga como único objetivo la defensa de los derechos de las mujeres.
Fuera Giacchi. Ni una Menos.
Plenario de Trabajadoras del Partido Obrero