#BalanceBienCuyano. El presidente de JR Mendoza, Leo Mastrángelo ve muy positivo el año de Cornejo y augura un mejor futuro

Actualidad

Damos por inicio el ciclo que BienCuyano organizó sobre el análisis de la Región y las gestiones de sus gobernantes provinciales por parte de los diversos dirigentes políticos locales de todos los sectores que conforman nuestra querida democracia. Para reflexionar, para disentir, para aportar, para creer… los mismos serán presentados en el correr de estas semanas para que nuestro público lector lo disfrute. Aquí nuestro primer análisis de la mano del abogado y presidente de la Juventud Radical de Mendoza, Leonardo Mastrángelo, que realiza un balance de la gestión del gobernador mendocino Alfredo Cornejo y de su provincia.

 

Primer año de orden y avances concretos

Desde la Juventud Radical de Mendoza, analizamos el primer año de gestión de nuestro gobernador y su equipo. Para ello es indispensable realizar un diagnóstico de la situación con la que se asumió el gobierno el 9 de diciembre.

Haciendo un breve análisis, tenemos que luego de 8 años de pésima gestión peronista-kirchnerista, la provincia se encontraba sumergida en una enorme crisis social, económica y política. Por empezar varios sindicatos (ATE y SUTE, principalmente), fueron artífices de que la educación y la gestión estatal se deteriorara como no había sucedido antes.

En materia de salud, el Hospital Carrillo (el más reciente) no tendía al máximo de su capacidad (siendo una gran falacia su inauguración). En este contexto se encontraban salas de hospitales (como el Central) que preparadas para internación, fueron utilizadas para depósito, u otras (como en el Schstakow) que se las usaba como consultorio privado de los médicos. Así de mal se encontraba la gestión de salud que los pacientes si querían ser atendidos se tenían que llevar sus insumos.

Por otro lado, encontramos la falta de gobernabilidad en la economía. Por citar un ejemplo los productores, especialmente los vitivinícolas, no encontraban respuestas para salir adelante.  Se suma la gravísima falta de pago a los proveedores que, entre otros, abastecían de meriendas a los niños mendocinos por ejemplo. Ni hablar del altísimo déficit dejado, luego de haber asumido Jaque con superávit (¿a dónde habrá ido eso?)

Finalmente, la mayor muestra de falta de gestión (de un gobierno que decía defender al pueblo) fue la falta de pago de sueldos a empleados provinciales durante noviembre y diciembre (y a duras penas octubre).

Con esta realidad, Alfredo Cornejo y su equipo, se pusieron a trabajar, a gestionar para sacar a la provincia de esta dolorosa y calamitosa realidad.

Así, la primera medida fue pagar en tiempo y forma a los trabajadores entendiendo que es lo indispensable. Se sumó como pilar fundamental el pago a los proveedores para que los hospitales públicos tengan materiales de asistencia y los colegios estatales la merienda para los estudiantes. En este marco se analizaron todos los contratos de personas que no cumplían sus funciones o lo hacían de manera deficiente, entendiendo que su sueldo lo pagamos todos y no era racional sostener una masa de personas que se les pagaba sin una contraprestación. Es menester destacar que en materia productiva se está trabajando con los productores vitivinícolas para mejorar su situación a través de un Estado intervinient. Para concluir en este tema, destacamos el avance con la obra Portezuelo del Viento, que lleva más de 50 años de análisis, pero que se ha avanzó en los últimos meses en un acuerdo con la Nación y otras provincias del COIRCO para realizarlo.

En materia de salud por ejemplo, los hospitales ordenaron sus salas, el aumento de presupuesto de las industrias culturales acercan la política cultural al pueblo,  los clubes barriales tienen asistencia económica para salir adelante (no se hace espectáculo del deporte, sino inclusión por el deporte) y las víctimas de violencia de género son asistidas como se debe (Cornejo fue el primer gobernador que brindo presupuesto al flagelo de la violencia de género).

Por otro lado, se estableció el ítem aula en materia educativa. Esta medida fue cuestionada pero al paso del tiempo se demostró que garantizó que los estudiantes tengan más días de clases que los últimos años, con docentes comprometidos con su labor. El SUTE, quien había gobernado de manera indirecta la política educativa de Mendoza, se enfrentó a esta medida ya que le quitaba el poder que erróneamente le había dado Pérez. La función del sindicato es defender racionalmente a los trabajadores, no disponer la política educativa del estado. En este tema, Cornejo se puso firme su meta: querer que los estudiantes terminen séptimo grado sabiendo sacar cuentas y leer de corrido. Algo tan elemental como descuidado por los peronistas. A pesar de las críticas que recibió el gobierno, hoy en día la gran mayoría de la sociedad está de acuerdo con lo hecho.

Llegamos a seguridad. El mapa de la inseguridad pregonado por Jaque, nunca apareció (¿se la habrá extraviado?). Mentira descarada si la hubo. No proteger a los que cumplen la ley y trabajan dignamente, no es ser progresista, es ser al menos un hipócrita. Así la política de seguridad nunca tomó un rumbo serio desde 2007. Asumido el gobierno actual, se hizo mayor hincapié en este aspecto. Se equiparon a los efectivos y a los móviles, se mejoró el sistema de datos del

Ministerio de Seguridad, se modificó el código procesal penal, estableciendo mayor rigurosidad en la prisión preventiva, se mejoró la capacitación de los estudiantes de policía, dentro de otros avances. Ello redundó en una disminución de la inseguridad que fue destacada por las encuestas.

Finalmente, en lo que refiere a la justicia, entendiendo que a varios jueces y fiscales, por cuestiones políticas o simplemente dejadez, no se avocaban a resolver eficientemente los casos que se les designaban, se tomaron las medidas correspondientes, siendo estas los juris de enjuiciamiento o proponiendo modificar la ley de sanciones para establecer medidas intermedias.

Para concluir, este fue un gran año, que buscó con gestión que los ciudadanos nos podamos atender en hospitales públicos, los estudiantes tengan más días de clases, los docentes responsables sean premiados por su dedicación, los proveedores y demás empleados estatales cobren como corresponde, la seguridad sea tratada como prioridad principal, y todos sintamos que nuestro gobernador se preocupa porque vivamos cada día mejor.

Por ello para el año que viene estamos convencidos que siguiendo por este camino, mejorando la salud, la educación y la seguridad, con un concreto plan de obras y con la seriedad financiera y económica, nuestra provincia finalmente se recuperará. Felices Fiestas.

 

Abog. Leonardo Mastrángelo

Presidente Juventud Radical Mendoza