La grieta mendocina no cierra: Persecución a legisladores que votaron la modificación de la Ley 7722

Actualidad Mendoza

El debate que abrió la reciente gestión del gobernador Rodolfo Suarez sobre cuál tiene que ser la matriz productiva que saque a Mendoza para adelante, tiene una grieta que aún no cierra.

No solo la clase dirigencial de Malargüe y la Cámara Empresaria aún siguen solicitando al gobierno provincial y a los legisladores que al Departamento del sur mendocino se le abra una puerta a la inversión megaminera y pueda modificarse la proteccionista Ley 7722, sino a gran parte del mismo gobierno de Suarez que aún le recrimina haber cedido ante el pedido popular.

La grieta está abierta y algunos lo manifiestan por caminos de la intolerancia. Tal es el caso del acto vandálico que padeció la diputada provincial Hebe Casado del PRO (Cambia Mendoza), a quien le escribieron el frente y la vereda del policonsultorio que comparte junto a otros profesionales de la salud en calle 9 de julio de San Rafael.

La legisladora es médica especializada en inmunología y votó en su momento a favor de la modificación de la ley 7722 que impide el desarrollo minero metalífero en Mendoza y luego, cuando el gobernador Suárez solicitó la derogación de las modificaciones, ratificó su voto a favor de las reformas.

Desde que la diputada hizo público su postura a favor del desarrollo minero ha venido teniendo amenazas de todo tipo y durante el fin de semana las pintadas fueron la primera concreción de esa postura claramente fachista de los sectores antimineros que no aceptan voces disonantes en el tratamiento de un tema de vital importancia para el desarrollo económico que Mendoza necesita para crecer, tras una década de no generar empleo en el sector privado.

La presidente del PRO en Malargüe, Verónica Bunsters, expresó su solidaridad con Casado al indicar “repudio las amenazas que ha venido recibiendo la diputada Hebe Casado y el escrache con pintadas en su consultorio privado, estos métodos son intolerables en un sistema democrático. Como genuina representante del Cuarto Distrito electoral y fiel a su profesión, me consta el trabajo de investigación que ha realizado Hebe para intentar darnos una legislación que cuidaba el agua y el ambiente pero que los intolerantes echaron por tierra recurriendo al miedo y a la desinformación. Hago pública mi solidaridad con la diputada y solicito a los organismos del Estado pertinentes que investiguen a fondo para dar con los autores de este lamentable hecho, que no son más que vándalos y delincuentes comunes que utilizan el amedrentamiento y el terror como forma de imponer sus ideas. En una sociedad democrática no podemos seguir soportando este tipo de acciones. Reconozco en el diálogo la única herramienta para marcar diferencias y alcanzar consensos”.

Fuente: Ser y Hacer de Malargüe