En la Mendoza jurásica, el senador Bonarrico tildó de «asesinos» a los legisladores que acompañaron el proyecto de Ley de IVE: «Son ideas propias de las jerarquías eclesiásticas oscurantistas que militan a favor del aborto clandestino» afirmó el senador Jiménez

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La última del pastor-senador «panqueque», el mismo que cada fin de semana rompe la tranquilidad de los vecinos aledaños a su templo de la Mendoza capital. El senador provincial Héctor Bonarrico (Partido Intransigente) brindó un polémico sermón en la iglesia evangélica en el que aseguró que el “diablo gobierna la Nación”, en referencia al proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), que obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados y que luego fue rechazado en el Senado. Si bien las palabras de Bonarrico salieron a la luz una semana antes del debate en la Cámara Alta, el video se viralizó en las redes sociales en las últimas horas, debido a los argumentos utilizados en contra del aborto legal, seguro y gratuito.

“Desde el año 2000 yo venía predicando que esto se venía, como el matrimonio igualitario. Hemos dejado que el diablo gobierne la Nación a través de las personas”, manifestó el pastor mendocino, en un video titulado “¿Por qué el aborto ofende a Dios?”.

Recordó que en 12 años nunca se presentó una ley alternativa al ‘no’ al aborto, por lo que trajo a colación un proyecto que presentó en la Legislatura que busca la creación de la “Dirección de Protección del Niño No Deseado y su Madre”. “Vamos a ayudar económicamente para que estudie, tenga medicamentos, no le falte plata”, dijo el senador.

Entre sus motivos en contra de la legalización del aborto, Bonarrico citó un programa que supuestamente vio en televisión: “Anoche veía el History Channel y vi cómo las elefantas defendían a sus crías ante el ataque de los leones. Si no querés al niño, no te puedo obligar. Por eso el proyecto”.

“Gloria a Dios que la mamá de San Martín no lo abortó. ¿Y Belgrano? no tendríamos bandera. Dios les dio el propósito. Nadie nace sin propósito”, lanzó Bonarrico, quien también ejemplificó a Alexander Fleming.

“No es gratuito, la joda de los otros, la pagamos nosotros”, añadió, en referencia al aborto legal, seguro y gratuito.

Bonarrico calificó de “asesinos” a los legisladores que votaron a favor de la iniciativa. Tampoco se salvó Mauricio Macri: “Empezando desde el presidente para abajo, todos dieron lugar para que esto acontezca, es una vergüenza nacional. Todos los diputados que votaron a favor tendrían que ir presos. Son asesinos”.

“Si fundamentamos lo que dicen algunas mujeres, que es por el abuso que quieren abortar, cualquier ser abusado, sea hombre o mujer, tiene una lastimadura en el alma. El abusado es degradado en su interior, difícilmente se supere. Por eso ofrezco ayuda psicológica y espiritual. Y si le agrega el asesinato, esa mujer tendrá dos lastimaduras en su alma, la de haber sido violada y la del asesinato”, agregó Bonarrico, en otro de los tramos de su discurso religioso.

También se refirió a las personas que impulsan la separación del Estado argentino y la Iglesia. “Veo jóvenes brutas que quieren culpar a la Iglesia. ¿De dónde sacaron para armar el Poder Judicial? De la Biblia. No se puede separar a Dios del hombre. El hombre sin Dios es peor que un animal”, aseveró el pastor.

“Imagínense si la virgen María hubiera dicho ‘yo voy a abortar’. ¿Quién iba a creer que su hijo es fruto del Espíritu Santo?”, relató Bonarrico.

“Quedar en cinta era vergonzoso en tiempos de María. No es como ahora que las escuelas regalan ‘perservativo’ (sic), en vez de decir que la práctica del sexo es para el matrimonio. Cuando yo era joven decir preservativo era una mala palabra. Hoy no, saben todo”, dijo el legislador, en referencia a la educación sexual integral.


«La culpa la tiene Ramón que lo trajo a la Legislatura»

Por su parte, el senador provincial del Frente de Izquierda-PTS, Lautaro Jiménez, se refirió a la publicación realizada por el legislador Héctor Bonarrico «Lo que afirma Bonarrico es muy preocupante. Respetamos el culto evangélico y a sus creyentes. Y defendemos el derecho a la plena libertad de culto. Pero las manifestaciones de este Senador, pidiendo la cárcel para los legisladores nacionales que votaron a favor de la Ley de IVE son más propias de los regímenes teocráticos y las jerarquías eclesiásticas oscurantistas que militan a favor del aborto clandestino, que de un funcionario público».

El senador Jimenez criticó también que Bonarrico «hable como legislador afirmando cosas realmente muy graves sobre las niñas que quedan embarazadas por una violación. A la madre de una niña de tan sólo 9 años le pregunta si le creería a su niña que fue embarazada «por obra del espíritu santo», siempre amparándose en que todos tenemos un destino escrito previamente por dios. En los mismos términos se refiere al gravísimo caso de una niña de 12 años abusada en San Carlos cuya familia decidió continuar con el embarazo. Siempre responsabilizando a las mujeres violadas y a las madres de esas menores por esos embarazos».

«Este senador que José Luis Ramón hizo ingresar en esta Legislatura, atenta contra los programas de salud sexual y reproductiva, aparándose en haber aprendido mucho de medicina, al afirmar que los preservativos son «mala palabra». Al igual que Abel Albino, desinforma en temas muy importantes para la salud pública. Hay leyes de educación sexual y salud reproductiva que debería estudiar el Senador, de lo contrario con su discurso está generando consecuencias que tienen que ver con el aumento de las enfermedades de transmisión sexual, embarazos no deseados y mortalidad materna e infantil» acusó Lautaro Jiménez.

Finalmente el legislador del FIT anunció que reclamará ante la Cámara de Senadores por haber designado a Bonarrico como Vicepresidente Primero de la Cámara. Y responsabilizó «a José Luis Ramón por haberlo llevado en sus listas y mantener todavía un Interbloque legislativo con una persona que se opone no sólo a la ley de interrupción voluntaria del embarazo sino también al reconocimiento del derecho al aborto no punible para niñas de 9 y 12 años embarazadas por una violación, que es ley desde 1921».