Tal como desde BienCuyano anticipamos hace dos meses atrás, ante el fracaso de Alfredo Cornejo de posicionarse como candidato a presidente de la Nación; luego engancharse, con paellas y vinos incluido como vice de Patricia Bullrich; el invento de una encuesta nacional de la consultora de Reale de ponerlo entre los politicos más influyentes del país, entre Macri, Larreta y Pato… Alfredo finalmente recurre al descarte, el Plan B que era volver al pago chico, volver a Mendoza.
Es así que el muchacho rubio que maneja las redes del gobernador apretó el botón rojo el lunes y postuló a su jefe, Alfredo Cornejo, como candidato a gobernador de Mendoza. Automáticamente, el séquito del cornejismo actuaron más como trolls que como dirigentes políticos y reverenciaron el operativo clamor a su patrón.
Sin dudas, no tuvo el efecto deseado en la sociedad mendocina, ya que inmediatamente el medio MDZ armó una encuesta que, con el correr de las horas, terminaron bajándola porque los números le estaban jugando en contra a Don Alfredo.
Tal vez, el deseo del gobernador Rodolfo Suarez no condice con lo que quiere el pueblo de Mendoza. Tal vez, las designaciones a dedo, las bajadas automáticas de candidatos, no es el mejor camino que tenga que elegir el radicalismo mendocino dentro del espacio Cambia Mendoza. Tal vez hay mejores ideas, mejores propuestas, más allá del corralito cornejista, que el pueblo mendocino quiere escuchar dentro del oficialismo.
En ese marco, hasta ahora el único que se planta ante el cornejismo es el radical Luis Petri que en declaraciones a MDZ Radio señaló «Sé de este operativo clamor (de Suarez a Cornejo), pero sigo sosteniendo que sean los mendocinos los que elijan el candidato de Cambia Mendoza y que no sea una decisión de cuatro o cinco dirigentes Es imprescindible que generemos alternativas. Hay orden fiscal y se administró bien la pandemia, pero la provincia está estancada. Hay que crecer y generar empleo».
Y agrego «Era inminente que se produjera la definición. Ya lo dije en su momento: las convicciones no se negocian. Cualquier escenario para mí era igual». Sobre la casi confirmada posibilidad de que competirá en las PASO contra Cornejo, sostuvo: «Me siento muy bien. Es saludable y enriquecedor. Es decirle a los mendocinos cómo queremos transformar la provincia. Hay muchas cosas que mejorar».
Es evidente que la verdadera sombra de Alfredo Cornejo no es Omar De Marchi, que corresponde a otra fuerza política dentro del frente Cambia Mendoza, sino Luis Petri, porque ya confirmó que quiere un debate interno dentro del radicalismo y del frente multipartidario oficialista, para frenar la cooptación del cornejismo, como hace La Cámpora con el PJ, del partido centenario en Mendoza.
Días atrás, Luis Petri hizo una convocatoria a la unidad en sus redes sociales, aunque lanzó un tiro por elevación contra la dirigencia provincial al pedir reglas claras de cara a las PASO del frente oficialista Hago un llamamiento a la UNIDAD en Cambia Mendoza. Pero no una unidad que sea sometimiento encubierto sino pluralidad: con reglas claras para competir para dar certeza a los mendocinos. Nuestro enemigo es el populismo”, dijo Petri, que al mismo tiempo arrobó a Alfredo Cornejo y De Marchi.
Luego, Petri sostuvo que no fue invitado al último congreso partidario en la sede ubicada en calle Alem de la Capital, lo cual provocó incomodidad y criticas puertas adentro por parte de dirigentes radicales.
El exdiputado nacional pide pluralidad y más participación de voces dentro del radicalismo, por eso comenta «Acá hubo un congreso partidario y dijeron que la UCR iba a competir con un candidato único. No me victimizo. Algunos son más o menos susceptibles. Yo voy al frente y debato».