La angustia del padre de Florencia Romano “Me difamaron como si fuese un delincuente y soy un simple laburante plomero gasista, que tuve el dolor de reconocer el cuerpo de mi hija”

Actualidad Mendoza

El Estado omnipresente que se convierte en una serpiente mordiéndose la cola, crea víctimas por ausencia y ante su reclamo las vuelve a victimizar, los hombres y mujeres que lo sostienen y lo forman convierten su humanidad en defender el puesto y olvidan en la acequia la bonhomía, el Estado es una piedra donde el paso del tiempo solo la ha endurecido.

Los padres de Florencia Romano sufren un «doble femicidio», el de su hija y el del gobierno provincial acusándolos de «ser parte de los responsables por el femicidio en Maipú» en el marco de un juicio civil. José Romano y Cristina Mopardo lideraron la convocatoria que se concretó cerca del mediodía de este miércoles en la explanada de Casa de Gobierno, se paran delante de la prensa para decirnos que a nosotros también nos puede pasar, que activemos para no estar parados ahí, quieren evitar en otros el dolor eterno de haber perdido un hijo en manos de la violencia y ante un Estado ciego, sordo, mudo e indolente.

Cristina, la mamá de Flor, deja este mensaje: “Es muy triste todo lo que dijo el abogado del gobierno, eso habla de él y no de mí, hoy estamos acá y Florencia ya no está, estamos por todas las que están, no tengo palabras, si seguimos así van a seguir los femicidios”.

La madre agrega que «si esto sigue así, no ha cambiado nada. No podemos seguir más así. No hay política de defensa. Solamente echan culpas a las víctimas».

Posteriormente a la conferencia de prensa para responder al abogado del Gobierno provincial, Ricardo Canet, quien los señaló a los padres como parte de los responsables por el femicidio en Maipú , BienCuyano encontró en un rincón a José, el padre de Florencia, que expresó con sencillez e indignación la angustia de este dedo acusador del gobierno provincial.

Así quedaron anotadas a fuego estás reflexiones:
”Nadie me va a devolver a mi hija “
“Dijeron tantas mentiras sobre mi hija y sobre mi “
“Mi hijo está destruido “
“Este dolor no se lo deseo a nadie “
“Me difamaron como si fuese un delincuente y soy un plomero gasista”
“No saben lo que es reconocer a una hija asesinada”

Tal vez no podamos darle consuelo por qué no lo encontramos ni para nosotros mismos que no somos las víctimas, pero si debemos estar presentes y reclamar que el Estado de turno no sea un cómplice a sueldo.

Hasta los 21 años no llega a la madurez el cerebro. A los 14 es niña y el gobierno con las declaraciones está violando los derechos internacionales del niño.

En la conferencia también estuvieron presentes los abogados de la familia Romano, Agustín Magdalena y Cristian Vaira Leyton. El último de ellos calificó la contestación de la demanda del Estado como «descabellada, improcedente y una brutalidad». «Desde entonces venimos exigiendo protocolos de actuación del 911 y todavía no existen. Esperamos que la sentencia civil sea ejemplificadora para el Estado y para que las cosas por fin cambien», agregó.

Por otro lado estuvo presente Verónica Valverde, diputada provincial de Unidad Ciudadana Mendoza, quien dejo estas palabras refiriéndose a la grave situación que hoy nos convocó: “Un día negro porque uno hace el repaso de todas las mujeres que han sufrido femicidio, hoy estamos hablando de una chica de 14 años que podría estar viva , acompañamos a su Mamá y a su papá, parte el alma ver tanto dolor que podría haber sido evitado, una vida que no está y el estado de la provincia dice que es responsabilidad de los padres , me extraña que haya abogados de áreas tan importantes que cometan semejante brutalidad jurídica, Dice la convención internacional de los derechos del niño que deben ser contenidos por los Estados, nuestro país elevo esa norma a rango constitucional por medio del artículo 75 inciso 22 de la constitución nacional : » las familias deben tener pleno goce de derechos para a su vez poder garantizarlo a sus hijos, me pregunto con este estado provincial que no nos garantiza poder caminar libres y seguras, hay que revisar normativas y también hay muchos funcionarios que no deben estar ejerciendo funciones que les pagamos todos los mendocinos”.

Nos queda a nosotros los humanos votantes y aportantes humedecer la dureza existente con nuestras lágrimas o como un picapedrero responsable romper para construir.

Por Martín Orozco especial para BienCuyano