Un día Alfredo Cornejo se decidió a robar, o mejor explicado técnicamente «expropiar» Penitentes…. si si, amigo biencuyano, bien al estilo venezolano de Chávez o Maduro, el ex gobernador se manoteó forzosamente el principal centro de esquí de la provincia de Mendoza y con él se robó el sueño de la clase media argentina de disfrutar de la nieve y tener la posibilidad económica de vivir la experiencia de esquiar.
El escandaloso caso del complejo de esquí Los Penitentes sumó un nuevo capítulo para el bochorno. Luego de la expropiación que resolvió la provincia en perjuicio de la familia López Frugoni, que construyó el lugar, el predio fue azotado por 8 años de abandono y vandalismo. Y mientras se espera que se concrete una demanda por 25 millones de dólares contra el estado provincial de parte de López Frugoni, en concepto de resarcimiento, este año el gobernador Alfredo Cornejo otorgó a dedo la explotación del complejo de esquí a unos empresarios amigos para que hicieran cargo en la temporada invernal de un espacio precario y peligroso. No hubo ninguna licitación previa, y sí asignación discrecional.
Desde 2021 hasta 2023, se realizaron gestiones para otorgar permisos de uso precario y lanzar procesos licitatorios, pero estos no pudieron concretarse por diferentes razones. A su vez, la empresa expropiada, «Los Penitentes Centro de Esquí S.A.», ha iniciado una demanda contra la Provincia, lo que ha añadido complicaciones al proceso.
El proyecto está respaldado por las leyes Nº 8845 de Turismo Provincial y Nº 8999 del Plan Provincial de Ordenamiento Territorial, además del Decreto Nº 1447/75, que brindan las herramientas necesarias para avanzar con la declaración de utilidad pública y expropiar los tres polígonos restantes.
No obstante, la primera expropiación de Penitentes ordenada torpemente por Cornejo en el 2019, por ignorancia y desconocimiento del tema turístico, estuvo mal hecha ya que quedaron polígonos sin expropiar que son fundamentales para la operación del centro de esquí.
Tras tantas temporadas invernales perdidas, recién hoy logran remendar el error. La Cámara de Senadores de Mendoza, por mayoría de votos, dio sanción final al proyecto que declara de utilidad pública y sujeto a expropiación a tres polígonos de tierra en el ex Centro de Esquí Los Penitentes, ubicado en el distrito de Uspallata, en Las Heras. Esta iniciativa, impulsada por el Poder Ejecutivo, tiene como antecedente la Ley N° 9175, que permitió expropiar seis de los nueve polígonos que componían el predio, consolidando el control de la Provincia sobre la mayor parte de las tierras del centro.
En esta ocasión, la superficie expropiada abarca 42 hectáreas y 9.013,52 metros cuadrados. Tras la expropiación, las tierras pasarán a estar bajo la posesión de la Provincia de Mendoza, con la intención de licitarlas para su refuncionalización integral, administración, explotación comercial y puesta en valor. Este proceso incluye el desarrollo de actividades turísticas y deportivas, como parte de la reactivación del Centro de Esquí y Parque de Montaña Los Penitentes.
Torpes y brutos
Una sucesión de torpezas por parte del gobierno radical de Rodolfo Suarez y Alfredo Cornejo hicieron que el emblemático centro de esquí de la provincia de Mendoza, por tradición, historia, cercanía a la zona del Gran Mendoza, lo destruyeran por completo por la misma ineptitud de no saber manejar un polo turístico de gran relevancia nacional e internacional.
El gobierno de Mendoza del radical Rodolfo Suarez oficializó en el año 2020 la expropiación del centro invernal Los Penitentes, tras la ley que aprobara la legislatura provincial un año atrás, en tiempos del primer gobierno de Cornejo.
Bien al estilo «Mendozuela», el por entonces gobernador Alfredo Cornejo ordenó expropiar el predio de 50 hectáreas que en ese momento la tenía la empresa Penitentes S.A, con la excusa de destinarlo «a la explotación turística, deportiva y comercial de un polo de actividades de montaña».
Los caprichos, la ambición y la desesperación por «las mordidas» hicieron que Los Penitentes sea un sitio abandonado, destruido, peligroso para los visitantes, perdiendo oportunidades laborales y temporadas invernales desde hace años. Sin dudas, uno de los grandes fracasos de este gobierno radical, que tratan de esconder debajo de la alfombra.
En cinco años de gestión estatal, el radicalismo mendocino logró destruir por completo el centro de esquí, dejándolo en un estado total de abandono, sin inversión alguna y sin medidas que garanticen seguridad a los turistas.
La demanda por US$25 millones contra Mendoza
Los antiguos propietarios de Los Penitentes Centro de Esquí S.A., la familia López Frugoni, aguarda el juicio por la demanda civil contra la Provincia de Mendoza, en el que reclama 25 millones de dólares por la expropiación de urgencia del complejo de esquí.
Esa cifra corresponde a la conclusión a la que llegaron los peritos de la empresa demandante sobre el valor del predio de 42 hectáreas más los daños. Entre los perjuicios consideraron la expropiación de urgencia, la entrega a los Puquios en 2019 sin contrato ni contraprestación, más la utilización de las maquinarias, equipamientos, uniforme, radios y demás elementos necesarios para operar un centro de esquí y que estaban bajo custodia provincial.
De acuerdo a la denuncia, el Gobierno abandonó el predio dejando sillas colgadas y permitiendo actos vandálicos, robos y hurtos. Y en medio de este expediente judicial se conoció que Cornejo entrega el complejo a unos empresarios amigos, según plantean fuentes del sector, cuando la provincia enfrenta un juicio millonario. A esto se suma el expediente por retrocesión, ya que cuando se expropia un bien, el Estado tiene un tiempo para darle el uso para el que fue expropiado. Fuentes ligadas a la investigación hablan del «cajoneo» de los expedientes para dejarle las manos libres a los operadores cornejistas.
Sobre los nuevos adjudicatarios de Los Penitentes, el grupo Mapsa, fuentes calificadas del sector dijeron que «no tienen experiencia para esta escala de operación turística, ellos están acostumbrados a manejar la tirolesa de Villavicencio y de Costa Norte, y esto requiere otra preparación y estructura de conocimientos».
Expropiación mal hecha
La empresa dueña original del predio a su vez pretende la nulidad de todo el trámite expropiatorio que incluyó además una indemnización de apenas $1.486.537, lo que considera parte de un error de tipeo durante la valoración del predio que hizo el Estado.
Lo que reclama, entre otros puntos, es que la inversión fue «absolutamente privada y el Estado nunca puso un peso: la empresa hizo los caminos, la infraestructura, las redes de gas, el servicio de electricidad, el estado provincial nada».
A su vez, en el expediente se suscribe que «la expropiación de urgencia estuvo mal hecha y quedaron polígonos sin expropiar que son fundamentales para la operación del centro de esquí», advirtiendo que ese detalle podría complicar una nueva concesión. Letrados consultados por este medio dijeron que «si la familia dueña original del predio quisiera, puede alambrar la peatonal y la confitería y convertir el complejo en un lugar intransitable».
