Piquetazo Día 3: Marcelino Iglesias afirma que los sueldos de hambre de los trabajadores de Guaymallén no es por su culpa sino por la inflación

Actualidad Mendoza

Ante la falta de respuesta por parte del intendente, Marcelino Iglesias, los trabajadores y trabajadoras, decidieron profundizar los reclamos salariales con una adhesión del 100% de los Trabajadores de los servicios y continua su plan de lucha por tercer día consecutivo.

El jefe comunal radical no da brazo a torcer y totalmente fuera de foco de la realidad acusa al kirchnerismo (?) sobre la crisis de los trabajadores «Hoy estamos sufriendo un paro injusto, porque somos de los municipios que más altos salarios tienen y de los que cumplimos nuestras obligaciones salariales sin tickets y sin subterfugios. Vamos al frente y practicamos una relación cara a cara con el personal. Lo he hecho durante siete años y medio. Sin embargo, no es casualidad que este paro salvaje se largue en Mendoza. Qué casualidad que aquellos que adscriben al Gobierno nacional, que es el que genera la inflación que nos hace daño al bolsillo de todos y sobre todo a los más humildes, sean los más gritones y agitadores contra el Gobierno municipal. Nosotros no tenemos la maquinita de imprimir. Una la tiene (el exvicepresidente Amado) Boudou que la compró por ahí y la otra la tiene el Banco Central, que no le alcanza porque tiene que andar importando (billetes). Es ese el grave daño».

Negrerino Iglesias

Por más acusaciones a Boudou, Cristina y la mar en coche… la realidad del intendente que tiene uno de los salarios más de sus pares en la provincia es que en Guaymallén, las y los trabajadores municipales tienen un básico de la clase inicial de 28 mil pesos y un salario de bolsillo de 56 mil pesos a la clase inicial. Además del pedido de recomposición salarial debido a la crisis que golpea a la Familia Municipal aseguran que los trabajadores sufren diariamente amedrentamiento, prácticas persecutorias y maltratos laborales.

Trabajadores de Espacios verdes, Dirección de obras Municipales, Servicios públicos y Movilidad se sumaron. Están afectados los servicios de recolección de residuos, higiene urbana, riego, desmalezado, limpieza de cunetas y barrido de calles del Departamento.

En medio de la desesperación y una crisis que ahoga su días finales de gestión, Marcelino Iglesias saltó con un comunicado denunciando que el reclamo de sus trabajadores por mejores sueldos es ilegal «El pasado miércoles, se declaró un paro sorpresivo e ilegal en la Municipalidad de Guaymallén. El motivo explícito, fácilmente explicable, es el deterioro que la inflación produce en los salarios de los trabajadores».

«Desde el ejecutivo municipal no hay negación del diálogo, nunca ha sucedido; pero jamás se hará bajo presión. La elevada inflación, que corroe los ingresos de los asalariados, es generada por las erráticas, confusas y desatinadas políticas del Gobierno nacional. Es bastante llamativo que el conflicto, en forma de paro salvaje, se desate en un municipio de otro signo distinto al mismo, y sea fogoneado por delegados con fueros sindicales que, en su gran mayoría, adscriben al que es el verdadero y único responsable del empobrecimiento del conjunto de la población», detalla el comunicado oficial.

Martin Rodriguez, empleado municipal y dirigente social salió al cruce a responder «Marcelino Iglesias tiene lo mismo de ridículo que de cínico. Dice de todo menos cuál es la propuesta salarial. Deje de decir sandeces y finalmente haga una oferta que supere los salarios de hambre, la pérdida por inflación y todos los ítems en negro que tenemos».

En ese mismo contexto, el precandidato a intendente del Frente de Izquierda, Federico Telera, estuvo presente en la concentración que realizaron los trabajadores municipales en la puerta del edificio central del municipio.

Al respecto Telera dijo: “Me acerqué a acompañar el reclamo municipal, en el justo pedido de mejores condiciones laborales y sueldos dignos, igual a la canasta básica familiar. Estos trabajadores sufren la inflación y la crisis a fondo, cobrando salarios básicos de indigencia. Mientras Marcelino Iglesias y sus funcionarios cobran abultadas dietas, solo para garantizar los negociados con los empresarios de la construcción que viven de la teta del Estado con la obra pública, que se indexa con la inflación y los cambios del valor del dólar”.

“El final de la gestión de Iglesias sólo deja a municipales en la miseria más profunda, al tiempo que designa un sucesor como Marcos Calvente que es la expresión concreta que los negociados con las empresas constructoras van a seguir intactos. Inclusos los que no respetan ningúna ley como los hermanos Paco; y seguramente continuará la privatización de sectores, todo para que ningún vecino vea ninguna mejora con barrios inundados, falta de luminaria, limpieza, entre muchas otras penurias”

“Esto se tiene que terminar, por eso estamos presente con los trabajadores, porque hace falta alguien que se plante en defensa de los intereses de los que sostienen el funcionamiento del municipio, este será el rol de la izquierda en esta crisis que se profundiza día a día” finalizó el candidato guaymallino.