Los datos sobre la incidencia de la pobreza y la indigencia que se presentaron en estos últimos días han demostrado que los argentinos están en un delicado estado de situación.
De acuerdo a los datos difundidos por el Indec, en el Gran Mendoza aumentó el nivel de personas que están bajo la línea de la pobreza y se elevó desde el 38,6% al 41,7% en el segundo semestre del año pasado.
Esto significa que hay 435.458 personas que son pobres en el conglomerado urbano que mide el organismo nacional. Aunque es un nivel más bajo respecto al cierre del 2021, cuando estaba por encima del 44%, tuvo un aumento importante en la segunda mitad del 2022.
Además, en el informe se contabilizan 73.586 en situación de indigencia, lo que equivale al 7% de la población del Gran Mendoza.
Todos estos datos se traducen en que de 346.571 hogares del mayor conglomerado provincial, 105.150 viven en condición de pobreza y 17.358 están en la indigencia.
En ese grave contexto, el precandidato a gobernador por el Frente de Izquierda y de los Trabajadores Víctor da Vila expresó «Quienes gobiernan hacen oídos sordos en presencia de los pedidos populares como el trabajo genuino y alimentos, teniendo en cuenta que la provincia es el quinto lugar con más pobreza en el país».
Las organizaciones sociales de la unidad piquetera realizaron esta semana una jornada nacional de protesta en las principales ciudades del país, con la consigna “18 millones de pobres y millones de indigentes». “Basta de hambre y ajuste”.
No obstante, en la provincia de Mendoza no permitieron realizar la concentración y conferencia de prensa, a la unidad piquetera «por los reclamos de recorte de los alimentos nacionales y del hambre de la Ministra Tolosa Paz», ya que por iniciativa del gobierno provincial se hicieron presentes efectivos policiales en Casa de Gobierno, volviendo a repetirse actitudes por parte de los gobernantes de forma represiva y desestimando el derecho a la protesta.
En repercusión de lo sucedido, el precandidato de izquierda Víctor da Vila se refirió “Con la pobreza creciendo aceleradamente en todo el país, Tolosa Paz la agrava recortando la ayuda social. Mendoza tiene niveles más altos de pobreza que la nación, pero Cornejo y Suárez solo tienen represión cómo respuesta”.
“La inflación, los salarios de miseria, la falta de trabajo, alquileres altísimos son la base para que crezca el hambre y la bronca. Solo a un funcionario que vive despegado de la realidad, con una dieta millonaria, lo puede asombrar que aflore «el que se vayan todos».
da Vila concluyó: “Si no se les pone un freno, nos llevan a una catástrofe social aún mayor, por esto hay que plantarse al ajuste y la miseria y hacerle frente, a este desafío te convocamos desde la Izquierda”.