El complejo de Sierra Pintada, abandonado hace 25 años con 5200 tambores de uranio, y la incógnita ¿Tienen relación los casos de cáncer en los sanrafaelinos?

Actualidad Mendoza

El Complejo Minero Fabril de Sierra Pintada es una mina de uranio de explotación a cielo abierto. Está ubicado a 35 km de la ciudad de San Rafael en la cuenca hídrica que abastece a la ciudad y otros distritos a través del Río Diamante.

Funcionó desde la década del 70 hasta 1995, cuando se detuvo la explotación por un problema de costos: en ese momento el precio del uranio estaba bajo y era más económico importarlo para satisfacer el consumo de la central ATUCHA I.

En Sierra Pintada quedaron sin tratamiento hasta el día de hoy 2.400.000 tn. de colas de uranio, 1.000.000 tn. de roca estéril, unas 600.000 tn. de mineral marginal, 5.340 tambores y 1.200.000 tn. de agua en las canteras y en los diques de evaporación. La CNEA (Comisión Nacional de Energía) un organismo estatal nacional, es propietario del predio de Sierra Pintada, estuvo a cargo de la pasada explotación y es responsable del tratamiento de los residuos generados hasta hoy sin remediar

Luego de 25 años de postergaciones, en octubre del año pasado el
el secretario de Ambiente de Mendoza, Humberto Mingorance, anunció el inicio de las tareas de remediación de la mina de uranio Sierra Pintada, en el Departamento de San Rafael. La medida se puso en marcha tras la Declaración de Impacto Ambiental firmada en julio del 2019 por el Gobierno provincial. De esta manera, la CNEA está obligada a realizar los trabajos para eliminar de suelo mendocino estas toneladas del mineral metalífero, el cual se encuentra enterrado en trincheras y disuelto en el agua almacenada por efectos de correntías, lluvias e infiltraciones de las viejas canteras.

Se trata de la Fase I que incluye el manejo de los residuos sólidos, con alto contenido de uranio, dispuestos en 5.223 tambores de 200 litros provenientes del tratamiento del uranio de Sierra Pintada procesado en Dioxitex, Córdoba, que se encuentran depositados en San Rafael desde la década del 90. También, se deberá remediar casi 1 millón de metros cúbicos de agua almacenada en las canteras con contenidos de uranio, radio y arsénico superiores a los límites permitidos.

La remediación ambiental del CMFSR se desarrollará en el sitio ubicado en el Distrito de Cuadro Benegas, Departamento de San Rafael. Tiene como objetivo mejorar la calidad del agua de cantera minimizando la concentración de uranio, radio y arsénico y gestionar en forma segura y definitiva los residuos sólidos.

Los pasivos ambientales están controlados a través de exhaustivos monitoreos radiológicos y convencionales -que incluyen agua superficial y subterránea, sedimentos, suelo y aire-, pero que son necesarios sanear para asegurar la protección de las personas y el ambiente a largo plazo, en forma segura y sostenible.

Desde Ambiente aclararon que el proceso de limpieza se efectúa de forma conjunta, esto es sólidos y agua de cantera, sin utilizar agua fresca de origen subterránea o superficial.

El área del Complejo San Rafael se encuentra atravesada en su parte central por el Cauce del Arroyo El Tigre, cuyo curso de agua tiene un caudal normal aproximado de 0.16 m3/s y fuertes avenidas estivales que pueden alcanzar los 800 m3/s. De acuerdo a estudios hidrológicos e hidrogeológicos realizados, la totalidad de la infraestructura del Complejo Minero Fabril del Yacimiento se ubica en la cuenca de este arroyo, que ha sido desviado para dar lugar a las operaciones mineras. Incluso el movimiento general del flujo subterráneo mantiene un sentido de drenaje hacia El Tigre, aguas abajo de las instalaciones.

Este arroyo vuelca sus aguas al Río Diamante, a 5 km del complejo minero, a partir del cual se abastece de agua San Rafael y otros asentamientos poblacionales, tanto para consumo humano como para riego en un área de una 65.400 hectáreas. La relación existente entre el Río Diamante y el principal asentamiento del departamento de San Rafael es directa.

De esta manera, la cuenca abastece de agua a los habitantes de la zona de San Rafael, y a los numerosos establecimientos agropecuarios en la zona.

Por su parte, el diputado provincial de Protectora, Mario Vadillo, presentó un proyecto para que los legisladores mendocinos visiten el Complejo de Sierra Pintada, en San Rafael, a fin de verificar el trabajo que se está realizando en estos momentos del saneamiento de los pasivos ambientales «Es importante que los legisladores constaten directamente en el lugar como se está trabajando, si la retiración es efectiva».

«Hay mucha gente de San Rafael que está muy preocupada porque se han dado muchos casos de cáncer en la zona, y que estos temas altamente graves de salud en la población, sean una derivación de todo el material radioactivo del que se está manipulando» afirmó Vadillo.

Y agregó «Sierra Pintada tiene más de 5200 tambores que contienen 200 kilos de uranio cada uno, agua y sustancias tóxicas que en 25 años de abandono, estos tambores se estaban precolando, es decir, producto de las diferentes lluvias, condiciones ambientales y vientos, fueron generando lixiviación que llegan directamente a contaminar el agua».

«Esto nos hace reflexionar qué minería queremos, si después cuando tratamos sustancias radicativas como el uranio, terminamos dejando tirado y abandonando todos los residuos fruto de ese trabajo», concluyó el legislador de Protectora.

Para Mendoza, los pasivos generados por el complejo minero fabril Sierra Pintada representan una de las deudas ambientales más importantes de la provincia, ya que la solución se vino postergando durante un cuarto de siglo. De esta manera, la actual gestión busca impulsar, exigiendo a la Comisión Nacional de Energía Atómica, la remediación ambiental de los residuos contaminantes que se generaron durante varios años.