Frente al debate caliente planteado desde el gobierno nacional sobre el tema de la gestación y llevado al escenario de la opinión pública, el senador nacional Julio Cobos sumó una nueva propuesta que contribuye a superar el «vacío legal» que existe sobre algunas problemáticas claves y necesarias para desentramar en la sociedad argentina: el mendocino presentó un proyecto de ley para regular el alcance, las relaciones, consecuencias jurídicas y el proceso judicial de autorización de la gestación por sustitución.
La gestación por sustitución –común (y tal vez despectivamente) llamada “alquiler de vientre” un tópico muy debatido, y de ese debate participaron –a favor y en contra- tanto juristas como representantes de la Iglesia y grupos feministas. Con la excusa de que los dilemas éticos y jurídicos que conlleva la gestación por sustitución son de una envergadura tal que ameritaría un debate más profundo, se decidió excluir del Código Civil y Comercial esta figura, que ya existe en un número creciente de países del mundo. El resultado fue la eliminación en el último y nuevo Código –que admite como fuentes de filiación otras técnicas de reproducción humana asistida- de cualquier referencia al tema. No prevé la maternidad por subrogación, pero tampoco la prohíbe, lo cual no evita que el fenómeno suceda, sino que lo deja fuera de la posibilidad de contralor uniforme que el proyecto preveía.
El ex vicepresidente de la Nación Julio Cobos propone un nuevo proyecto de Ley para avanzar en el tema y ser una alternativa de acceso a la condición de ser padre o madre, de aquellas personas que quieren formar una familia y explicó que “la gestación por sustitución es el procedimiento por el cual una mujer gesta un hijo para otra persona o pareja, debido a la imposibilidad de alguna de ellas de llevar por sí ese embarazo y con ello el sueño de formar una familia. Las alternativas para estas familias que hoy contempla el Código Civil son la adopción o la reproducción humana asistida, dirigida a parejas que no pueden tener hijos pero condicionado a que alguno de los integrantes lleve adelante el embarazo. Queremos ampliar las posibilidades con el fin de dar oportunidades a las personas que quieren tener hijos y no pueden”.
“Este vacío legal resulta discriminatorio para casos que, ya sea por algún tipo de patología preexistente o porque se trate de parejas de igual sexo -en especial de sexo masculino- no pueden llevar adelante el embarazo. La normativa vigente es escasa o nula, limitando a cientos de parejas que quieren tener hijos u obligándolas a buscar soluciones en el extranjero. El Estado debe brindar esas posibilidades y garantizar la igualdad y equidad para todos los integrantes de la sociedad; contemplando especialmente el interés superior del niño y el derecho personalísimo a su identidad”.
El senador mendocino destacó que “al no estar regulado este procedimiento, se presenta la situación en la que terceros actúan como intermediarios y se aprovechan de las necesidades de ambas partes. De aquí que contemplamos establecer penas de hasta 6 años de prisión para este tipo de acciones fraudulentas”.
Por último, Cobos manifestó que “es necesario fijar pautas para que se pueda llevar a cabo la gestación por sustitución. En la práctica se realiza -ya que no está prohibido- pero con pocas o nulas garantías legales para la gestante que participa, para los padres que esperan cada día la llegada de su hijo y en especial para ese niño por nacer. Esto se ve en la jurisprudencia a través de distintos fallos que son lo que terminan por resolver esta controversia en forma particular y conforme a la discrecionalidad y buen criterio del juez. Esperamos contar con el acompañamiento y la aprobación de los demás legisladores y hacer realidad esta ampliación de derechos para muchos ciudadanos que buscan construir una familia”.