San Luis vivió tres días intensos en este histórico fin de semana, donde las más de 120 mil personas que llegaron a la provincia para ser parte del 35° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Intersexuales, Bisexuales y No Binaries, se reunieron para debatir, descubrir distintas realidades, divertirse, bailar, reflexionar, manifestar la bronca, denunciar, vibrar, reír.
Este año se definieron 15 ejes temáticos, los cuales se trataron en más de 100 talleres, y fueron las mujeres y disidencias les protagonistas de una agenda que busca hablar sobre problemáticas que demandan soluciones concretas.
Con largas jornadas, mujeres y disidencias compartieron sus experiencias, ideas, propuestas y conocimientos, en distintas escuelas y centros culturales puntanos, en las calles y en las dos plazas céntricas Pringles e Independencia que también fueron escenario de charlas, mates, risas y consensos.
El centro de la capital puntana y las zonas aledañas se llenaron de colores por las ferias de artesanías, productos y comidas que se instalaron. Al mismo tiempo se realizaron representaciones artísticas y culturales, en las tres jornadas del evento.
La histórica marcha del domingo
Uno de los momentos más relevantes de los encuentros es la tradicional marcha, donde la provincia de San Luis vivió un momento histórico con la marcha más grande que se vivió en esas tierras, con miles de mujeres y disidencias que se reunieron para salir a las calles y alzar la voz por les que no tienen.
Con una marcha de treinta y cinco cuadras, miles de mujeres y disidencias de todo el país, trabajadoras, desocupadas, de los pueblos originarios, estudiantes, se expresaron en las calles de la capital de la provincia. En la cabecera de la movilización se destacaban pancartas con la pregunta ¿Dónde está Guadalupe? Exigiendo su aparición con vida y señalando la responsabilidad del Estado.
El reclamo por la aparición de la niña Guadalupe Lucero encabezó la marcha central del 35º Encuentro Plurinacional. Integrantes de la Comisión Organizadora portaron la bandera de arrastre del encuentro para encabezar la marcha, y la familia de Guadalupe, a quien se vio por última vez el 14 de junio pasado en la puerta de su casa en San Luis, con su mamá como especial invitada, estuvieron en segundo lugar portando la pancarta que hace un año y cuatro meses encabeza los reclamos por la aparición de la niña de seis años.
Durante un largo recorrido de 7 kilómetros, las más de 120 mil mujeres y disidencias que se dieron cita en San Luis recorrieron calles e instituciones, alzando la voz por los reclamos que atravesaron el trabajo de los 105 talleres y que se repitieron en cada entrevista periodística o se escucharon coreados a viva voz por los diferentes grupos.
En el recorrido, uno de los momentos de mayor tensión se dio cuando la larga manifestación pasó por la Iglesia Catedral de San Luis, que se encontraba vallada y con personal policial, a la espera de lo que no ocurrió.
Algunas cantaron temas oportunos con frases como “Iglesia, basura vos sos la dictadura”; otras colgaron pañuelos naranjas del movimiento “Iglesia y Estado, asuntos separados”. Un tercer grupo, menor pero más reaccionario, prendió fuego una goma de auto que rápidamente fue sofocada.
Las vallas de metal fueron utilizadas como placas de resonancia para acompañar los coros feministas con críticas a la institución eclesial.
Otro de los puntos álgidos de la marcha fue el pasaje por la Jefatura Central de Policía, también vallada, donde al reclamo por la aparición de Guadalupe se sumó el pedido de justicia para Florencia Magali Morales, muerta en pandemia en una comisaría de Santa Rosa del Conlara en el interior provincial, el 5 de abril del 2020.
“Nadie se suicida en una comisaría, a Magali Morales la mató la policía”, reclamaron las manifestantes.
A ella la siguieron una hilera de carteles con una decena de mujeres desaparecidas en Argentina: por mencionar a algunas, Sofía Herrera, María Cash y Valeria López. El desfile de sus rostros y nombres en pancartas, lejos de pasar desapercibido, fue acompañado de un aplauso solemne.
«¿Donde está Tehuel?, fue otra de las consignas, en relación al joven trans desaparecido en marzo de 2021 en la provincia de Buenos Aires.
El orden establecido para marchar incluyó a las familias de víctimas de femicidas en San Luis, a las mujeres indígenas de todos los territorios, a quienes conviven con una discapacidad, a organizaciones de niñeces, y a movimientos sindicales y partidos políticos.
El reclamo por una Ley de Humedales también se repitió en la marcha y se discutió en los talleres al igual que el repudio a los recortes en materia de discapacidad.
La caminata, que comprendió 8 kilómetros, inició en el Parque La Cerámica y se desplazó por calle Pringles hacia el corazón del centro capitalino.
La imagen fue histórica e inolvidable y quedará grabada en la memoria de San Luis como el evento más multitudinario que ha vivido.
La ceremonia ancestral
Con una ceremonia ancestral y al grito de «Marichi wew», voz indígena Mapuzungun que significa «diez o mil veces venceremos», se había realizado el sábado pasado la apertura del 35º Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Bisexuales, Intersexuales y No Binaries en Territorio Huarpe, Comechingón y Ranquel en San Luis.
El lugar de encuentro fue el parque de la ex Cerámica, donde a partir de las 9 se congregaron las primeras agrupaciones que habían llegado este viernes, a las que se fueron sumando las que arribaron este sábado, y el local viento Chorrillero acompañó una mañana fresca que no logró enfriar el ánimo de miles de mujeres y diversidades.
Invocando al silencio «como principio sanador» las autoridades Huarpes y Ranqueles encendieron una fogata e hicieron sus oraciones a los elementos de la naturaleza pidiendo «protección para el Encuentro» y exigiendo la libertad de las mujeres mapuches detenidas durante el operativo desalojo de la comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu en Villa Mascardi, Rio Negro, el miércoles último.
Tras ello, y a medida que el lugar se iba poblando de banderas, se dio paso a la lectura de un extenso escrito, leído por partes por quienes organizaron el evento, cuya posta les fue entregada por las organizadoras de La Plata, última ciudad sede.
El documento empezó con la defensa del cambio de nombre, que dejó de llamarse Encuentro de Mujeres para tomar su denominación actual. Sectores feministas no acordaron con esa modificación, por lo que se darán cita el mes próximo, también en San Luis.
«Queremos ser firmes: no es solo un nombre, es la potencia de la lucha de nuestres hermanes indígenas, de mujeres, lesbianas, trans, travestis, bisexuales, intersexuales y no binaries», leyeron las organizadoras. «Nombrarnos plurinacionales y con las disidencias significa romper con las fronteras nacionales que nos impone el colonialismo, y con las fronteras de los cuerpos que nos impone un biologicismo que define una supuesta normalidad a partir de la supremacía blanca y el régimen heterosexual y el binomio varón-mujer en el que se nos encasilla», añadieron.
Río Negro será la sede del Encuentro de Mujeres y Disidencias del año próximo
El año próximo la patagónica provincia de Río Negro será sede del Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans, Bisexuales, No binaries e Intersex, según se informó este lunes en el acto de cierre de la edición 35° del Encuentro que tuvo lugar en la ciudad de San Luis.
Este lunes a primera hora de la mañana miles de personas se concentraron en el predio de la Ex Cerámica, en la zona sur de la capital puntana, para acompañar con su voto en la elección de la provincia que recibirá el próximo Encuentro Plurinacional, cuya ciudad elegida será Bariloche.
Junto a la elección del próximo distrito que recibió a miles de mujeres y disidencia, también se procedió a la lectura de las conclusiones de los más de 100 talleres que se realizaron entre sábado y domingo.